Universidad Complutense de Madrid

Master de Relaciones Internacionales y Comunicación

 

 

Tesina

Promoción XIII – Curso 2005-2006

 

 

AL-YAZIRA

1996 - 2006

DIEZ AÑOS DE EFERVESCENCIA EN EL MUNDO ÁRABE Y DENTRO DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES  

Al Jazeera Logo

 

 

Emilie DIJOUX

Septiembre del 2006

Tutor: Juan Antonio Sacaluga



Advertencia

 

Por una parte, quiero señalar a mi lector que soy una estudiante francesa. Por otra parte, como titular de una licenciatura de español de la Sorbonne, tomé la decisión de traducir todas las citas para incluirlas en mi trabajo y así facilitar la lectura. Las citas más importantes en versión original se encuentran en el anexo I.


Índice

 

 

Índice   4

Prólogo   6

Introducción   8

Primera Parte: Al-Yazira, Génesis e Historia de una Cadena Árabe   10

I.              Presentación de Qatar   10

A.             Historia y economía del pequeño emirato   10

B.            Las reformas del Cheikh Hamad   12

C.            El emir y la creación de una cadena de televisión por satélite qatarí 14

II.             Medios de comunicación árabes antes y después de Al-Yazira   16

A.             La aparición de la televisión en el mundo árabe   16

B.            Las primeras experiencias de televisión por satélite a partir de los años 1960  17

C.            La guerra del Golfo: revolución en el espacio mediático árabe   18

D.            Un espacio mediático competitivo: las competidoras de Al-Yazira   19

§              Al-Manar 20

§              Arab News Network (ANN) 21

§              Abu Dhabi TV   22

§              Al-Arabiya  22

§              Al-Hurra  23

III.            Presentación de Al-Yazira   25

A.             Historia de una cadena panárabe   25

B.            Los medios humanos, técnicos y financieros de la cadena  26

C.            La diversificación de la cadena  28

D.            Su ética, su línea editorial y sus programas   29

Segunda Parte: Al-Yazira, Voz del Mundo Árabe   34

I.              Al-Yazira y las corrientes que atraviesan el mundo árabe: el islamismo y el panarabismo   35

A.             La emergencia de una opinión pública árabe   35

B.            ¿Qué es el islamismo?  37

C.            La guerra civil de Argelia: otra visión del islamismo   40

D.            Al-Yazira y la cuestión palestina: una cadena panárabe   42

II.             Al-Yazira, CNN del mundo árabe   45

A.             CNN International: la globalización de la información   46

B.            Al-Yazira: el efecto CNN en el Medio Oriente   48

C.            ¿Es Al-Yazira un medio de comunicación alternativo?  49

Tercera parte: Al-Yazira en las Relaciones Internacionales  52

I.              Los videos de Bin Laden como punto de arranque   53

A.             Antes del 11-S   53

B.            Después de los atentados del World Trade Center y del Pentágono   55

II.             La guerra mediática  57

A.             La contestación de un orden de la información impuesto por los Estados Unidos   57

B.            La toma de consciencia de la existencia de una opinión pública árabe   62

III.            Aportaciones y porvenir de Al-Yazira   66

A.             ¿La democracia en Oriente Medio?  66

B.            El periodismo según Al-Yazira   67

C.            Al Jazeera International: un nuevo desafío   68

Conclusión   71

Anexos   74

Anexo I: Citas en versión original  75

Anexo II: Qatar en la península arábiga  80

Anexo IV: Código ético de Al-Yazira   82

Anexo V: Los programas de Al-Yazira   83

Bibliografía   87u


Prólogo

 

Mac Luhan tenía una visión: la de una aldea global en la que todos los ciudadanos compartirían los mismos valores y podrían realizar intercambios sin barrera alguna. Si en el campo de la economía, la globalización es hoy una realidad, en otros campos, como el de la comunicación, podemos oponer a este concepto el del choque de civilizaciones de Samuel Huntington.

 

En efecto, el surgimiento, a mediados de los años 1980 de cadenas de televisión a vocación planetaria tal como CNN International hubiera podido significar la homogeneización de los valores, la “coca-colización” de las televisiones y de las culturas del mundo. Sin embargo, la aparición de una cadena de televisión por satélite tal como Al-Yazira en Qatar, diez años después del lanzamiento de  CNN Internacional puede significar que parte de los miembros de la comunidad internacional no están de acuerdo con la visión del mundo propuesta por CNN o por lo menos tienen una visión diferente de los eventos.

 

Fascinada por el gran poder de l televisión – el de crear una sensación de ubicuidad en cada televidente – y sensibilizada a las relaciones internacionales durante este Master en Relaciones Internacionales y Comunicación, decidí dedicar mi tesina al estudio de la cadena de televisión Al-Yazira. Pronto surgieron numerosas interrogaciones: ¿Cómo pudo aparecer tal medio de comunicación en una sociedad tan conservadora como la sociedad qatarí? ¿Cuáles fueron los eventos que propulsaron la cadena al rango de actor internacional? ¿Cuáles son los elementos sobre los que descansa el éxito de la cadena?  

Para contestar a estas primeras preguntas y a las que siguieron, durante mi periodo de investigación mis búsquedas se centraron en obras francesas y norteamericanas ya que encontré pocos trabajos sobre el tema escritos en castellano. También consulté obras audiovisuales: programas y documentales archivados en el instituto nacional audiovisual francés (INA) en París. Además encontré en Internet una fuente importante de información. Por fin, los periódicos Le Monde y Le Monde Diplomatique constituyeron un recurso muy interesante.

 

Para mi trabajo se mezclarán los cuatro tipos de métodos de investigación, es decir, el descriptivo, el analítico, el sintético y el comparativo. Necesitaré el método descriptivo para la parte monográfica de Al Yazira. Pero a continuación, sería necesario adoptar el método analítico para dar un enfoque crítico a mi trabajo. Por otra parte, me parece imprescindible comparar Al Yazira con otro medio, por ejemplo, la CNN, para revelar la originalidad, la novedad de la cadena, o al contrario, para mostrar que sólo adapta al mundo árabe un modelo ya existente. Por fin, pienso que uno de los objetivos de la tesina es también demostrar su capacidad a sintetizar una gran cantidad de información.

 

Eligiendo este tema, tengo varios objetivos. Primero, es un tema interesante en la medida en que no se han realizado muchos trabajos universitarios sobre la cadena de televisión qatarí. Además, el Master trata sobre las Relaciones Internacionales y Comunicación, así que mi tema se inscribe muy bien en esta línea.


Introducción

 

La cadena de televisión Al Yazira, cuyo nombre significa “la isla” o “la península”, nació sin ruido hace diez años en Doha, capital del hasta entonces muy poco conocido emirato de Qatar, mientras el mundo ya estaba cubierto por grandes redes de comunicación tales como la norteamericana CNN International o la inglesa BBC World Service. Como sus grandes hermanas está dedicada a la información 24 horas diarias. Emite en continúo desde febrero de 1999, está transmitida por satélite y es gratuita. Sus programas están en árabe clásico, lo que muchos autores consideran como la lingua franca del mundo árabe.

 

Al-Yazira adquiere su fama planetaria cuando difunde, un mes después de los atentados del 11 de septiembre del 2001 un video del enemigo número uno de los Estados Unidos, Osama Bin Laden. A partir de entonces, se convierte en el canal de difusión privilegiado de los mensajes del terrorista y otros miembros de la red Al-Qaeda. Por esta razón, firma un contrato de exclusividad en Occidente con la cadena de noticias estadounidense CNN. Sus imágenes y su logo aparecen en todas las pantallas durante la guerra de Afganistán. Hoy Al-Yazira está considerada como la entidad non estatal más poderosa del mundo árabe lo que le confiere un sitio privilegiado dentro de las relaciones internacionales.

 

Entonces, a lo largo de este trabajo, intentaremos contestar a estas dos preguntas: ¿Cómo Al-Yazira consiguió su éxito internacional? y ¿Cómo se convirtió en un actor clave de la actual geopolítica mundial?

La primera característica de Al-Yazira es su pertenencia al mundo árabe. A mediados de los años 1990, es lanzada con la fe de unos periodistas y el apoyo de algunos dirigentes qataríes, que creen en la viabilidad de su proyecto. Por eso, para entender lo que es Al-Yazira hoy, es necesario descifrar los desafíos subyacentes a su creación en Qatar y en el mundo árabe. En efecto, el mundo árabe es a menudo, percibido como una preocupación desde el 11 de septiembre del 2001 una preocupación en el escenario internacional y es el teatro de numerosas tensiones y contradicciones.

 

Entonces, en una primera parte de nuestra tesina, mostraremos cómo Al-Yazira es el fruto de un mundo árabe en busca de una posición en la geopolítica mundial. A continuación, en una segunda parte, analizaremos cómo Al-Yazira cristalizó todas las tendencias que atravesaban el mundo árabe. En su pantalla, Al-Yazira transcribe las preocupaciones de gran parte de los árabes. Así, Al-Yazira se convirtió en la voz de mundo árabe. Esta voz o opinión árabe, desde que el Presidente Bush designó a numerosos países musulmanes como parte de su “Eje del Malo”, tiene cada vez más importancia en las relaciones internacionales y más específicamente en la estrategia de guerra de Estados Unidos. Por consiguiente, enfocaremos nuestra última parte en el estudio de la importancia de Al-Yazira como actor de las relaciones internacionales.


Primera Parte: Al-Yazira, Génesis e Historia de una Cadena Árabe

                                                                                       

Qatar, uno de los más pequeños emiratos de la península arábiga[1], rodeado por potentes vecinos tales como Arabia Saudí o Irán, ocupa una posición geoestratégica cada vez más importante gracias a una actividad diplomática en todas las direcciones, de la que obviamente formaba parte la creación de Al-Yazira –como lo subrayaba ya en 1997 la periodista de Le Monde Diplomatique, Françoise Sellier[2]. Nuestro primero postulado reside en el hecho de que la creación de Al-Yazira es el fruto de una voluntad política. Después de presentar el país y el contexto geopolítico en que nació Al-Yazira, describiremos el espacio mediático en el que aparece para poder hacer una mejor explicación del funcionamiento de la cadena de televisión qatarí. 

 

I.                   Presentación de Qatar[3]        

 

  1. Historia y economía del pequeño emirato

 

Con 11.437 km² el emirato de Qatar es calificado de “micro Estado”. El 90% de sus 743.000 habitantes[4] viven en Doha, capital descrita como tranquila y, antes de la llegada del actual emir, también la más aburrida del mundo[5]. Doha es un islote de modernidad acuñada entre las aguas azules del Golfo Pérsico y el desierto. La estrechez del territorio contrasta con la riqueza nacional: con 18.789 dólares por habitante, Qatar tiene uno de los PIB por habitante más elevado del planeta.

 

Si los qataríes viven muy bien hoy, cabe precisar que no siempre ha sido así. Antes de los años 1930, el país vivía de la producción de perlas, mercado que se derrumbó cuando los japoneses lograron cultivar las ostras perleras. El descubrimiento de petróleo en Qatar  está tardío ya que tuvo lugar un poco antes de la segunda guerra mundial y su explotación sólo empezó a partir de 1949. Sin embargo, las reservas de petróleo de Qatar son bastante débiles con las de sus vecinos (15,2 mil millones de barriles de petróleo bruto en 2002 contra 264,2 mil millones para Arabia Saudí por ejemplo). La gran riqueza de Qatar viene de otro recurso energético: posee la tercera reserva mundial de gas. Según el autor Hugh Miles: “según los expertos, el crecimiento que conoce hoy el Qatar, debería continuar durante varias generaciones, quizás para los dos próximos siglos. Siempre que haya compradores para el gas del North Field, Qatar seguirá siendo rico[6].”

 

La historia del emirato es menos tranquila que la de su éxito económico: está marcada desde el siglo XVIII por violentas rivalidades entre las tribus locales, hasta la intervención británica de 1868 y la firma de un Tratado de paz. La debilidad de Qatar le obliga a apoyarse a poderosos amigos (una constante en su historia como lo veremos después): el emirato se convierte en protectorado británico en 1917. No recobra su independencia hasta 1971.

 

Entonces, el Cheikh Khalifa bin Hamad al-Thani toma el poder por medio de un golpe de Estado. Durante los veintitrés años de su reino emprende varias reformas pero a pesar de ello su derroche financiero es visible, pasando gran parte de su tiempo en sus residencias de la Costa Azul y de Suiza. En 1995, durante una de sus estancias en Suiza, su hijo, Cheikh Hamad toma el poder pacíficamente.

                                                                                                              

  1. Las reformas del Cheikh Hamad

 

A partir de la llegada del joven Cheikh Hamad al poder (sólo tenía 44 años entonces)  y en apenas un decenio, el pequeño Qatar conoce transformaciones profundas. Para muchos observadores, la monarquía islamista de obediencia wahhabita, hace sus primeros pasos hacia una democratización. Entre las más importantes reformas, destacamos una mejora de las condiciones de las mujeres que acceden al derecho a votar, la organización de elecciones municipales y la abolición de la censura. El 29 de abril de 2003, los qataríes aprueban por referéndum el proyecto de una nueva constitución. Este nuevo texto consagra la institución de un Consejo Consultativo y garantiza la vida privada, la libertad de expresión y de la prensa, la libertad de reunirse y el derecho de formar asociaciones, la libertad de culto para todas las religiones. En este torbellino de novedades surge también la cadena de información Al-Yazira

 

Pero no es suficiente enumerar todos los cambios que afectan la sociedad qatarí. Hay que quedar consciente del lugar donde y del momento en que se producen aquellas mutaciones. Las decisiones del emir no tienen precedentes en esta región del mundo. Según Rémy Leveau y Frédéric Charillon, directores de la obras Monarchies du Golfe. Les micro-Etats de la péninsule arabique, ”en Qatar, la apertura política fue impuesta y no hubo verdaderas presiones populares reivindicando una ampliación de la representación. Las reformas tuvieron lugar primero a causa de las presiones internacionales y regionales[7].” 

 

A continuación, los autores explican como el Qatar, en conflicto con sus vecinos (en particular con Arabia Saudí que se considera como el maestro en la región y la familia reinante Al-Saud que se considera superior a los Al-Thani) necesita el apoyo de los Estados Unidos. ¿Será para complacer a los norteamericanos que el emir emprende el camino hacia la democratización tan deseada por el Presidente Bush? ¿Los qataríes aspiran a convertirse en modelo para la región como lo sugiere la periodista de Le Monde Diplomatique, Pascal Boniface[8]? También para la periodista, “el acercamiento estratégico con Estados Unidos […] no es la elección del corazón sino más bien la de la razón y hasta de la coacción[9]” ya que Qatar es un país “rico, pequeño y débil.[10]

La guerra del Golfo de 1991 provocó desordenes en la región y en los años 1990, hay una crisis de confianza entre “el amigo americano y sus socios del Golfo porque ninguna de las cuestiones regionales ha sido arreglada.[11]

 

 

 

 

  1. El emir y la creación de una cadena de televisión por satélite qatarí

 

No obstante, Al-Yazira va a dar otra dimensión al emirato. Podemos preguntarnos si la creación de Al-Yazira obedece a una estrategia del Cheikh Hamad. Según el periodista Hugh Miles, que trabajó durante dos años sobre la cadena qatarí, el Cheikh Hamad ya tenía el proyecto de modernizar la televisión de su país en 1994, un año antes de destituir a su padre. Y apenas algunos meses después de tomar el poder, el emir creó por decreto la cadena Al-Yazira y casi de inmediato empezaron los preparativos para que funcionara. El emir constituye un equipo para dirigir la futura cadena con un periodista qatarí, uno de los consejeros financieros del emir y el Cheikh Hamad bin Thamer al-Thani que es designado presidente.

 

El emir también da a Al-Yazira los medios económicos para su comienzo. Dota la cadena de 137 millones de dólares. Este dinero, según las proyecciones, debía permitir a la cadena vivir durante sus cinco primeros años, tiempo después del cual debería ser capaz de asumirse. El regalo más importante que el Cheikh hace a Al-Yazira es su independencia. La libertad otorgada a la televisión es una novedad en la región. Para Olfa Lamloum, Al-Yazira nace de la voluntad de un pequeño país “buscando constituirse un nicho distintivo regional[12]”. Este nicho es la libertad de expresión consagrada hace tres años en una Constitución. La especialista del mundo árabe subraya que desde el principio la línea editorial de la cadena es definida no sólo en función de un proyecto periodístico, sino también en función de la imagen que Qatar quiere dar de sí mismo al mundo. Para Olfa Lamloum:

“[Al-Yazira] crea un espacio de expresión público panárabe para la demanda democrática, las diferentes contestaciones islamistas y el resentimiento hacia Estados Unidos[13].”  Con Al-Yazira, Qatar “posee las herramientas de su ambición y se libera de la influencia de su molesta gran hermana, Arabia Saudí[14].”

 

En otras palabras, Al-Yazira se inscribe dentro de la estrategia política del Qatar, permitiendo al joven emir trasladar los valores positivos occidentales que recibió durante su estancia y educación en Inglaterra a su país. Aunado a todo ello, el emir, concibió y supo captar el papel primordial que juegan los medios de comunicación en las relaciones internacionales, tal como lo sugiere la siguiente cita:

 

“En efecto, a partir del momento en que estas producciones y estas tecnologías aparecen como una necesidad para todas las naciones, las que no habrán podido dotarse de ellas serán obligadas a someterse a todas las condiciones que aceptarán dictar las naciones más prudentes que habrán invertido masivamente en los nuevos campos… Quien no utiliza tales instrumentos experimenta una regresión despiadada, y quien los utiliza sin producirlos está sometido a una verdadera explotación económica y política por parte de los productores[15].” 

 

La creación de Al-Yazira significa una emancipación para Qatar y para la región: se libera un espacio público regional y se crean las bases para una futura potencia internacional.

 

 

 

 

II.                 Medios de comunicación árabes antes y después de Al-Yazira

 

A pesar de que el mundo sólo descubre la televisión árabe a partir del 11-S, Al-Yazira no surge de la nada y tiene antecedentes. En realidad, la televisión árabe tiene una larga historia, un poco monótona, es cierto, pero tiene el mérito de existir. A nuestro juicio, Al-Yazira también debe su creación a las experiencias anteriores del mundo árabe. Por consiguiente, basándonos principalmente en la obra de Tourya Guaaybess, Télévisions arabes sur orbite. Un système médiatique en mutation (1960-2004), presentaremos estas experiencias previas a Al-Yazira así como el actual espacio mediático árabe. Nos enfocaremos en la televisión y más precisamente en la televisión por satélite.

 

A.     La aparición de la televisión en el mundo árabe

 

En primer lugar, pondremos de relieve con el profesor Jacques Barrat[16] que dentro del mundo árabe existen grandes desigualdades entre los países que poseen el “oro negro” que pudieron modernizarse gracias a los petrodólares, y los que no tienen este maná financiero han acumulado mucho retraso.

 

Según Jacques Barrat, en sus principios, la televisión estaba considerada como un instrumento satánico en el Machrek, donde el Islam condena como sacrilegio las representaciones de las formas vivientes. Sin embargo, Jacques Barrat nota que, a principios de los años 1990, la tendencia se había invertido: las autoridades musulmanas se habían dado cuenta del gran poder de sugestión de la televisión y empezaban a utilizarla con fines de proselitismo y de propaganda[17]. Tourya Guaaybess va en el mismo sentido que Jacques Barrat cuando afirma que al lanzar sus televisiones, los Estados árabes se apoyan en un discurso ideológico-político de desarrollo social y de defensa de una identidad nacional[18].

 

De hecho, la televisión hace su aparición en el mundo árabe en el contexto del Nuevo Orden Internacional de la Información y de la Comunicación (NOMIC) y del movimiento de los no alineados en los años 1960. Es en aquella época cuando aparece la teoría del centro y de la periferia en América Latina según la cual “centros” –Estados Unidos, Japón, Europa occidental – controlan los flujos de capitales que circulan entre ellos y las naciones de “la periferia”, en otros términos, los países del Tercer Mundo. También es cuando Herbert Schiller denuncia el imperialismo cultural de los Estados Unidos. En esta esfera de influencia, los países de la Liga árabe tienen una voluntad común: la creación de una institución audiovisual panárabe.

 

B.    Las primeras experiencias de televisión por satélite a partir de los años 1960

 

Varias experiencias fueron lanzadas para llegar a una versión árabe del sistema de intercambio de programas europeo “Eurovisión”. En 1966, se crea “Maghrebvisión” con Argelia, Marruecos y Túnez pero el programa salió mal a causa del conflicto del Sahara occidental que oponía Argelia y Marruecos.

 

Diez años después, en 1977, aparece la “Golfvisión” que reúne a los Emiratos Árabes Unidos, Bahrein, Arabia Saudí, Irak, Oman, Qatar y Kuweit. También se trata de intercambiar los boletines informativos de Eurovisión. Desgraciadamente hubo pocos intercambios.

 

El único proyecto que se destacó fue la Unión de radiodifusión de los Estados árabes (ASBU para Arab Satellite Broadcasting Union): es la primera etapa hacia un programa panárabe de mucha envergadura y se pone en marcha el proyecto de satélite común.

 

Por fin, el satélite Arabsat está puesto en órbita en 1985. Durante los primeros años y hasta la primera guerra del Golfo, sólo el 25% de sus capacidades serán utilizadas. Pero su funcionamiento cuesta mucho dinero: es Arabia Saudí quien invertirá el dinero necesario a la salvaguardia del proyecto, convirtiéndose en accionario mayoritario y por consiguiente en el actor con más influencia en el campo del audiovisual árabe.

 

C.    La guerra del Golfo: revolución en el espacio mediático árabe

 

Después de la guerra del Golfo, la situación cambia radicalmente: el satélite ya no basta para satisfacer la demanda y las antenas parabólicas se multiplican (a pesar de que en muchos de estos Estados, aquellas antenas siguen siendo prohibidas en la legislación).

 

Muchos Estados árabes crean su propia cadena transfronteriza y tres generaciones del satélite Arabsat están puestas en órbita. Entre las más importantes cadenas, podemos citar la ESC (Egyptian Satellite Channel) de Egipto o la MBC (Middle East Broadcasting Center) de Arabia Saudí que emite desde Londres y es la primera cadena por satélite independiente. Quiere ser una versión árabe de las grandes redes norteamericanas y como tal, es competidora de Al-Yazira.

 

Dos ejemplos más son el lanzamiento de ART creada por el Cheikh Saleh Kamel, que emite desde Italia, y la creación del grupo Orbit, introducido en la región por el príncipe Khaled bin Abdel Rahman al-Saud y que emite desde Bahrein.

 

Actualmente, existen varias decenas de cadenas por satélite árabes[19]. Además, notamos la llegada de cadenas occidentales: Ruppert Murdoch y Ted Turner han impuesto diversas cadenas por medio de acuerdos con los operadores árabes. A continuación, presentaremos las principales competidoras de Al-Yazira.

 

D.    Un espacio mediático competitivo: las competidoras de Al-Yazira

 

El lanzamiento de Al-Yazira en 1996 sacude las viejas costumbres de las televisiones nacionales árabes. En reacción a su creación, aparecen numerosas televisiones con la misma vocación panárabe y hablando el mismo idioma, el árabe.

 

A pesar de que la difusión por satélite permite un aunamiento de los espacios de recepción, definiremos una cadena árabe como un medio de comunicación que se dirige principalmente a una audiencia de lengua árabe y/o cuyo capital pertenece a un actor o un grupo de actores que también hablan árabe. Para definir la audiencia arabofóna, podemos decir que el principal criterio es el idioma árabe ya que está dispersada en todo el planeta.

 

Presentaremos las principales cadenas por satélite según su orden de aparición cronológica, basándonos en los artículos de Wikipedia sobre estas cadenas y en las propias páginas web de las mismas.

 

§      Al-Manar

 

Esta cadena de televisión es ante todo, el principal medio de comunicaci­ón del Hezbollah chiíta que se dedica a la resistencia de la ocupación israelí del sur del Líbano. Cuando puso fin al monopolio acordado a la televisión estatal Tele Liban, en 1977, Líbano se convirtió en el primer país de la región que autorizó estaciones de radio y televisión privadas a emitir dentro de sus fronteras[20].

 

Se difunde por satélite en el mundo árabe y en Europa. Emite a partir de1991 desde un lugar secreto en Beirut, en el Líbano. Si su idioma es el árabe, los informativos son también presentados en francés y en inglés. Suscita mucha controversia porque no vacila en interrumpir sus programas para difundir los atentados suicidas que tienen lugar en Irak, en Israel o en Palestina.

 

En Francia, hace dos años, la cadena tuvo muchos problemas debido a las numerosas denuncias por el carácter antisemita de varios de sus programas y tras una decisión del Consejo de Estado francés, se pidió la suspensión de la difusión de la cadena por el satélite Eutelsat. El 14 de diciembre del 2004, Al-Manar decidió suspender “voluntariamente” su emisión via este satélite. Sin embargo, sigue siendo disponible en Europa gracias a satélites de derecho no europeo o gracias a su página web: http://www.manartv.com.lb/NewsSite/News.aspx 

 

El 17 de diciembre del 2004, el Departamento de Estado norteamericano también puso obstáculos a la cadena al declarar que la cadena de televisión de ahora en adelante formaba parte de su lista de organizaciones terroristas a causa de sus incitaciones a cometer actos violentos. También prohibieron su difusión en su territorio. 

 

§      Arab News Network (ANN)

                             

Unos meses después del lanzamiento de Al-Yazira, Arab News Network aparece en el espacio mediático árabe. Es una cadena privada que se establece a partir de mayo de 1997 en Londres a iniciativa de Sawmar al-Asad, el hijo de Rifaat hermano del entonces presidente sirio, Hafez al-Asad. Entre los dos hermanos, existía una rivalidad y Rifaat ávido de poder, creó ANN para servir sus fines. Poco tiempo después, empezaron rumores en cuanto al origen de los fondos de la cadena. Se sospechó rápidamente que el príncipe Abdullah de Arabia Saudí alimentaba las cajas de la recién creada cadena y de esta manera, disminuir la influencia de la no censurada cadena qatarí, Al-Yazira.

 

§      Abu Dhabi TV

 

Está cadena fue lanzada en 2000. Emite desde la ciudad de Abu Dhabi en los Emiratos Árabes Unidos (EAU). No es una cadena de información continúa pero logró su éxito gracias a su cobertura de la guerra de Irak en 2003. Abu Dhabi TV está dirigida por el más importante grupo mediático de los EAU, Emirates Media Inc. que beneficia de una independencia editorial y administrativa pero al mismo tiempo, depende de fondos gubernamentales ya que está incorporada al  Ministerio de la Información y de la Cultura de los Emiratos. La particularidad de esta cadena es que produce casi la totalidad de sus programas, incluso los programas de ocio.

 

§      Al-Arabiya

 

Al-Arabiya está lanzada el 3 de marzo del 2003, con el claro objetivo de competir con Al-Yazira y de convertirse en la cadena de información con más credibilidad en la región. Está basada en Dubai y pertenece al grupo MBC y a inversores saudíes. Los dirigentes de Al-Arabiya pretenden diferenciarse de Al-Yazira declarando que no van a crear problemas con los demás países árabes y que su voluntad es mostrar la verdad sin hacer sensacionalismo. Al-Arabiya, como su rival, tiene una página web en árabe y en inglés: www.alarabiya.net en la cual se puede leer: 

“Aunque Al-Arabiya sólo está en su segundo año, ha logrado un gran conocimiento de la marca y un alto grado de confianza por parte de sus telespectadores. La programación de Al-Arabiya está construida para atraer a diferentes segmentos, con distintos intereses, en distintos momentos. De hecho, Al-Arabiya es la cadena perfecta para dirigirse a todo tipo de « buscadores de la información», que sea joven o viejo, hombre o mujer, que tenga distintos intereses, en materia de política, economía, finanzas, deportes, ciencia, tecnología, conocimientos generales y muchos otros campos. Ser una cadena árabe cuya misión consiste en dar el poder a sus telespectadores árabes, hace de Al-Arabiya una de las cadenas favoritas de los árabes para obtener una información digna de confianza y fiable.”

 

Sin embargo, la intromisión de los saudíes, desgraciadamente, provoca el efecto contrario al deseado, es decir quita credibilidad a la cadena, ya que la audiencia sospecha la censura de Al-Arabiya por sus poseedores.

 

§      Al-Hurra

 

Es un poco el caballo de Troya de Estados Unidos en el mundo árabe. En efecto, es una cadena de televisión por satélite basada en Estados Unidos y patrocinada por el gobierno norteamericano. Más precisamente, es el Congreso de Estados Unidos quien determina los fondos de la cadena. Funciona como una organización sin fines lucrativos bajo el nombre de Middle East Broadcasting Network, con su hermana Radio Sawa.  

 

Al-Hurra, que significa “la libre” empezó a emitir en febrero del 2004 en veintidós países de Medio Oriente. Pero como todos los instrumentos de la diplomacia norteamericana, está prohibido a la cadena emitir en el propio territorio estadounidense, según la Smith-Mundt Act de 1948.  Oficialmente, esta cadena está destinada a promover la democracia en los países árabes. Pero sobre todo, como lo subraya Tourya Guaaybess, forma parte del dispositivo mediático desarrollado en la región para mejorar  la imagen de los Estados Unidos ante las opiniones públicas árabes[21]. Debe ser un contrapeso a la peligrosa (a ojos de los Estados Unidos) Al-Yazira.

 

No debe ser expresadamente una organización pro-americana o un instrumento propagandístico. Sin embargo, la cobertura de los eventos por la cadena está muy favorable a las declaraciones de los oficiales americanos. Los discursos del Presidente Bush a veces ocupan la mayoría del tiempo de los boletines informativos.  

La cadena tiene su página Web (www.alhurra.com) en árabe y en inglés.

 

 

Desgraciadamente, es difícil medir la audiencia de las cadenas árabes: no existe un instituto árabe adecuado y además, en una región donde las antenas parabólicas siguen siendo prohibidas en muchos países, es difícil saber quien posee una. Así los resultados de las diferentes encuestas varían mucho. Cada operador proclama sus cifras y cada uno hace alarde de haber conquistado un gran parte del público árabe. Por ejemplo, para la última cadena que acabamos de presentar, Al-Hurra, tenemos resultados opuestos: mientras una encuesta dice que el 29% de los telespectadores adultos habían elegido la cadena en sólo una semana en el mes de abril del 2005, otra encuesta, realizada por Zogbey International, mostraba que el 0,02% de la audiencia árabe se dirigía hacia Al-Hurra como primera fuente de información y el 3,8% de la audiencia árabe elegía esta cadena como segunda fuente de información.

 

Sin embargo, vemos que Al-Yazira evoluciona en un ámbito competitivo: sus rivales, declaradas como tal o no, son numerosas. Entonces, a continuación veremos como funciona Al-Yazira, y en que descansa su éxito. 

 

III.              Presentación de Al-Yazira

 

Un haz luminoso barre un planeta que está girando de la derecha a la izquierda y el logo de Al-Yazira se dibuja en letras doradas, en alfabeto árabe obviamente, en el centro del objetivo de una cámara. La imagen se inmoviliza mientras en el fondo aparece la península arábiga. En el genérico de presentación de la cadena trasparecen sus objetivos y la imagen que quiere dar de sí misma: un flujo ininterrumpido de informaciones, la voluntad de hacer la luz sobre todos los eventos al nivel del planeta gracias a una cobertura que no deja escapar nada y, sobre todo, el punto de vista árabe, mostrado por las cámara-ojos de Al-Yazira, sobre la actualidad internacional. 

 

A.     Historia de una cadena panárabe

 

Este  genérico tanto como las imágenes de los informativos y programas de la cadena muestran también una gran semejanza (estética) con las grandes cadenas de información occidentales. En los diferentes documentales acerca de Al-Yazira rodados en la sede de la cadena en Doha[22], se observa la misma efervescencia característica de todas las redacciones de las grandes cadenas de televisión: hay vaivenes de periodistas, numerosas miradas giradas hacia pantallas de ordenadores o de televisión que difunden imágenes del mundo entero. Para Olfa Lamloum:

 

 “dos aspectos llaman la atención del visitante de la sede de la cadena en Doha. Primero, la extrema exigüidad de sus estudios y de su newsroom. Luego, el orgullo de trabajar aquí manifestado por los empleados y los periodistas. Al-Yazira está vivida como una revancha sobre la violencia simbólica del relato periodístico de los medios de comunicación occidentales[23].” 

 

Los principios de la cadena fueron difíciles. A pesar de ser gratuita, era poco conocida debido a su mala difusión en la región. En efecto, los mejores repetidores del satélite Arabsat estaban todos ocupados. En julio de 1997, Al-Yazira aprovechó la mala fortuna de otra cadena por satélite: tras un error de difusión de Canal France International (CFI) (¡difundió una película pornográfica un sábado a las cuatro de la tarde en vez de un programa infantil!), los saudíes que administraban el satélite pusieron fin al contrato de CFI y le prohibieron el acceso al satélite. Recuperando los receptores de la cadena, Al-Yazira, por fin, podía tocar un público amplio. Progresivamente, extendió el número de horas de sus programas. Si al principio emitía seis horas diarias, en 1997, pasó a ocho horas y después doce horas de emisión por día. Dos años después, empezó a emitir veinticuatro horas diarias.

 

B.    Los medios humanos, técnicos y financieros de la cadena

 

El reclutamiento de los periodistas de Al-Yazira se hizo sobre las cenizas de otra cadena, la versión árabe de la BBC World Service, resultado de un acuerdo entre la BBC y el grupo saudí Orbit, que emitía sus programas desde Londres. Sin embargo, después de varios desacuerdos, que afectaban la libertad y la independencia de la cadena según la BBC, la honradez de su país según los saudíes, se puso fin al proyecto. 250 periodistas y técnicos formados por la BBC fueron dejados en el paro, lo que según Hugh Miles causó “tragedias personales” para esos árabes que se habían instalado en Londres ya que muchos se encontraron sin tarjeta de residencia. Para muchos, la creación de Al-Yazira fue una suerte inesperada: 120 antiguos empleados de Orbit, se dirigieron hacia la capital qatarí para lanzarse en la aventura Al-Yazira, que comenzó el 1 de noviembre de 1996.

 

Hoy en día, el capital humano es sin duda alguna la mejor ventaja de Al-Yazira: son 1400 empleados que trabajan para la cadena alrededor del mundo, entre los cuales 450 periodistas de quince nacionalidades distintas. Esta diversidad de orígenes y también de ideologías políticas es una particularidad de la cadena y uno de los elementos claves de su éxito: Al-Yazira es el portavoz de todas las tendencias que existen en el mundo árabe como lo veremos de manera más detallada en la segunda parte de nuestro trabajo. En la página Web de la cadena podemos leer: “Nuestro equipo de serios periodistas, con su educación multinacional y sus diversos orígenes, comparten valores comunes: objetividad, precisión y la pasión para la verdad[24].”

 

Al-Yazira posee también los medios técnicos para garantizar a sus telespectadores que van a vivir en directo los eventos que se producen en cualquier punto del planeta: dispone de una red de treinta despachos en el extranjero y sesenta y seis corresponsales. Con veinticuatro boletines informativos diarios, siete programas de debates en directo, quince emisiones grabadas y dos páginas Web (una en inglés y una en árabe), Al-Yazira es un productor de imágenes y de información de mayor importancia en el espacio mediático global[25]. Las versiones electrónicas de la cadena permiten la prolongación de los debates que tienen lugar en los programas y constituye un espacio más de interactividad entre Al-Yazira y su público. Además, la versión inglesa permite romper la barrera del idioma: “con aljazeera.net en inglés, nuestro sueño de reunir las personas y los continentes se hace realidad[26].”

 

C.    La diversificación de la cadena

 

Al-Yazira se abre a cada vez más horizontes e intenta conquistar cada vez más telespectadores. Así, Al-Yazira se convirtió poco a poco en un grupo que cuenta con una cadena de deportes (Al-Yazira Deporte), una cadena que transmite debates sin comentadores (Al-Yazira Live) y por fin, desde el año pasado, Al-Yazira se dirige a los niños con Al Jazeera Children’s channel, una iniciativa de la tercera mujer de Cheikh Hamad, Cheikha Mozat Bint Nasser Al-Missned.

 

La estrategia de diversificación de Al-Yazira funciona. Aunque no exista un instituto árabe para medir el rating, varias encuestas han sido realizadas. En su obra, Olfa Lamloum da los resultados de algunas encuestas: según el instituto británico Spotbeam Communications Ltd, que cubre los países árabes de África del Norte y del Medio Oriente, Irán, Turquía, Afganistán, Israel y Chipre, Al-Yazira tenía treinta y cinco millones de telespectadores en octubre de 2002, mientras según el think tank estadounidense The Washington Institute for Near East Policy, en febrero de 2003, estaban cincuenta millones de telespectadores diarios, entre los cuales quince millones en Europa y en el continente americano[27].

 

Las páginas Web también conocen un gran éxito: Al-Yazira anuncia que su página Web recibió cinto sesenta y uno millones de visitas en 2002 y que forma parte de las cincuenta páginas Web más visitadas del mundo. 

 

D.    Su ética, su línea editorial y sus programas

                                                   

Otros ingredientes de la receta del éxito de Al-Yazira son su ética, su editorial. Al-Yazira respecta la misma ética que todos los grandes medios de comunicación. En su carta, que podemos encontrar en su página Web en inglés, apuntamos los valores que deberían guiar a todos los periodistas: “hacer suyos los valores periodísticos de honradez, ánimo, justicia, equilibrio, independencia, credibilidad y diversidad, sin dar la prioridad a consideración comerciales o políticas a expensas de consideraciones profesionales[28].”

Otros temas tratados en esta carta son:

v     la búsqueda de la verdad,

v     el respeto hacia su público, sus sensibilidades y su diversidad,

v     el respeto de los demás medios de comunicación y de la concurrencia,

v     la no consideración del scoop como un fin en si,

v     la distinción entre información, opinión y análisis para evitar la especulación y la propaganda,

v     la transparencia de las fuentes respetando sus derechos internacionales y la solidaridad con los demás periodistas en el terreno.

 

Su línea editorial es el elemento que a la vez provoca más controversia y hace la fama de la cadena: Al-Yazira se hace el eco de “la opinión y su contrario.” Con un objetivo de presentar todas las facetas de un mismo evento o de ser un espacio de libre expresión, independiente de presión económica o política, Al-Yazira intenta dar la palabra a actores opuestos:  

“Es la regla que preside el tratamiento de toda información, la organización de todos los debates y el arreglo de todas las entrevistas con los invitados internacionales y nacionales[29].”

 

Para conseguirlo, existe un servicio especial en la cadena que dispone de una lista de más de seis mil nombres cuidadosamente seleccionados para intervenir en los programas. Por consiguiente, “Al-Yazira rompe el tabú de la verdad única, incontestable e incontestada, de los regímenes árabes[30].”

 

En la escena internacional, este leitmotiv convertirá Al-Yazira en la cadena en la que se expresan todos los que no tienen acceso a los medios de comunicación en su propio país, y sobre todo en el mundo árabe donde están a menudo prohibidos, el lugar de expresión de la opinión política. Este principio aplicado a los programas de debate dio lugar a innumerables disputas y escándalos que como ya lo dijimos contribuyeron al éxito de Al-Yazira.

 

 Para terminar la descripción de esta cadena, ya que bien sabemos que los telespectadores no son fieles a una cadena sino a programas, presentaremos los programas más famosos de Al-Yazira[31].

 

Más de una opinión es uno de los programas más famosos de la cadena. Está presentado por Sami Haddad, en directo, desde Londres. Es un programa político en el que cada semana, son invitadas varias personalidades y expertos a discutir alrededor de una mesa redonda sobre un tema de la actualidad árabe o internacional.

 

Sin fronteras, animado por Ahmed Manssur, es un encaramiento entre dos personajes que se han destacado por sus posturas radicales. Son debates siempre muy vinculados a la actualidad.

 

Sólo para las mujeres es un magazine que durante hora y media trata de los problemas femeninos. Varias personalidades femeninas del mundo árabe vienen para expresar su punto de vista sobre temas sociales, políticos, científicos, medioambientales…

 

En todos estos programas, la interactividad con el televidente es fundamental: suscitando su participación, Al-Yazira crea una relación especial con su público. Por primera vez en el mundo árabe, una cadena de televisión ofrece un espacio de libre expresión. Hugh Miles pone de relieve que al principio, los telespectadores, tan poco acostumbrados a esta libertad, creían que eran los miembros de los servicios secretos que llamaban para intervenir en los programas[32].

 

Los dos programas más polémicos son “A contracorriente” y “La sharia y la vida”. A contracorriente, programa difundido el jueves, es un magazine de noventa minutos en el cual dos invitados que tienen convicciones opuestas debaten y defienden su punto de vista. El presentador, el Doctor Faisal Al-Qasim, no desempeña el papel de mediador, sino intenta crear un debate intenso entre los dos invitados. Doctor Faisal Al-Qasim es una de las figuras más emblemáticas de la cadena. En el plató, a menudo están confrontados un disidente árabe en exilio y un representante del gobierno de su país de origen, como lo nota Hugh Miles[33]. También declara: “En A Contracorriente, por primera vez, dirigentes árabes estaban tachados en plena luz de ser lacayos de los Estados Unidos y sus políticas estaban estigmatizadas por su servilismo, su hipocresía y su inmoralidad[34].”

 

La Sharia y la vida es un programa que aborda temas religiosos. El animador es el Cheikh Youssef Al-Qaradawi, un religioso muy respetado y muy famoso en el mundo árabe. Su papel consiste en deshacer todas las paradojas de la vida moderna desde un punto de vista religioso. Todos los temas son abordados: política, sexualidad… Pero Al-Qaradawi también habla de temas “profanos[35]“: “denuncia la presencia militar extranjera en tierra del Islam, pero elogia a la apertura política en Qatar, aprueba los atentados suicidas en Israel pero denuncia los atentados del 11 de septiembre […][36]

 

Del deporte a la religión a los índices bursátiles, Al-Yazira ofrece a su público una información completa. El politólogo francés François Burgat, analizando las causas del “fenómeno” Al-Yazira, declara en una entrevista acordada al periódico Le Monde:

 

Al-Yazira se impuso, primero, por el profesionalismo técnico de su tratamiento de la información. Rompió con la televisión árabe « de papá » que ignoraba todo de los rigores del montaje, en beneficio de planes interminables consagrados en su totalidad a la gloria del poseedor del poder. […] En el fondo, el éxito de la cadena se debe a dos recetas: sin caer en el maniqueísmo de las cadenas estatales, da en primer lugar una representación de las tensiones internacionales más cercana de la sensibilidad de los telespectadores árabes. […] da por añadidura […] la palabra al conjunto de las fuerzas políticas reales[37].”

              

Al-Yazira fue al origen un proyecto político del emir de Qatar dotado de una gran independencia. Numerosos oponentes a la cadena ponen de relieve que Al-Yazira es menos crítica hacia el gobierno qatarí y no se distingue tanto de las demás cadenas árabes existentes. Pero a este ataque, la cadena contesta que la política qatarí es un poco aburrida y que concierne sólo una mínima parte del mundo árabe, mientras su vocación es ante todo regional, y cada vez más global. Por eso, podemos decir que Al-Yazira ocupa un papel primordial en las sociedades árabes y musulmanas, como lo veremos en una segunda parte.

 


Segunda Parte: Al-Yazira, Voz del Mundo Árabe

                            

Como lo hemos mostrado en nuestra primera parte, Al-Yazira es una cadena de corte panárabe que nace en el mundo árabe. Como tal se hace el reflejo de todas las tendencias y todos los movimientos que atraviesan esta sociedad, convirtiéndose en portavoz del mundo árabe. Lo que pretende hacer Al-Yazira es descifrar y dar una inteligibilidad a la conflictividad que estructura el mundo árabo-musulmán: más del 73% de su cobertura periodística está centrada en los países árabes, declaran Mohamed El-Nawawy y Adel Iskandar[38].

 

Sin embargo, a partir de los atentados de Nueva York, y en gran parte a causa de los medios de comunicación occidentales, observamos una triste distorsión: se mezclan y se utilizan mal las palabras “Islam”, “islamismo”, “musulmán”, “árabe”, “integrismo”, “fundamentalismo”, “panarabismo” y… “terrorismo”. En este desorden, Al-Yazira propone otra visión de estos conceptos y adopta una postura original, incluso para los propios árabes. Entonces, en esta segunda parte de nuestra tesina, queremos mostrar los cambios que introdujo la cadena qatarí en el mundo árabe.

 

 

 

 

 

I.                   Al-Yazira y las corrientes que atraviesan el mundo árabe: el islamismo y el panarabismo

                                             

  1. La emergencia de una opinión pública árabe

 

En primer lugar, queremos definir cómo emergió una voz árabe, basándonos en el trabajo de Mohammed El-Oifi[39]. Según el autor, la emergencia de un espacio público árabe fue posible gracias a transformaciones sociales importantes: permitieron la eficacia de los procesos de comunicación y de difusión de las ideas. Estas transformaciones sociales son la urbanización, la politización y la alfabetización. Además, como lo mostramos en nuestra primera parte, a partir de la segunda mitad de los años 1990, este espacio público árabe fue servido por un sistema mediático cuyos capitales los detenían países del Golfo. Pero como lo subraya Mohammed El-Oifi: “La debilidad demográfica estructural de estos Estados les obliga a asociar los ciudadanos de los demás países árabes en el funcionamiento de sus medios de comunicación, lo que les permite presentarlos como medios panárabes y de utilizarlos para legitimar sus acciones en el escenario árabe e internacional[40].”

 

Al-Yazira es uno de estos medios panárabes basados en un país del Golfo. Entonces, cabe precisar que para el autor, estos países efectuaron una triple ruptura con el resto de los países árabes, consecuencia de sus elecciones políticas, económicas y estratégicas desde los años 1970.

 

El desmoronamiento de la monarquía en Irak y en Libia tanto como los desafíos políticos de Oman, Jordania y Arabia Saudí estaban considerados como el resultado de la expansión de la ideología del nacionalismo árabe. Para Arabia Saudí, esto constituía una amenaza y se decidió crear un Eje islámico. Así se produjo la ruptura política con el resto del mundo árabe. Por otra parte, se produjo una ruptura económica gracias a los recursos que provenían del oro negro. Los países del Golfo se enriquecieron considerablemente lo que permitió su modernización mientras los demás países árabes quedaban muy atrasados. Por fin se produjo una ruptura demográfica en los años 1980 y 1990: “con motivos tanto políticos como económicos como de seguridad, la mayoría de los países del Golfo favorecieron una inmigración asiática y rechazaron las poblaciones árabes, particularmente después de la guerra del Golfo. Progresivamente los nacionales se convirtieron en una minoría.”     

 

Pero esta triple ruptura tuvo consecuencias negativas: los países del Golfo ya no eran capaces de resistir a la presión americana. En esta región del mundo, la presencia estadounidense está considerada como una colonización. No es sorprendente que los terroristas suicidas que cometieron los atentados del 11-S fueran nacionales de países que oficialmente son “amigos” de los Estados Unidos. En estos países también asistimos a una fusión de las corrientes nacionalista árabe e islamista. Al-Yazira refleja bien esta tendencia como lo veremos a continuación.

 

 

  1. ¿Qué es el islamismo?

Primero, cabe distinguir lo que la mayoría de la gente amalgama: “Islam” e “islamismo”. El Islam es la religión del profeta Mahoma, basada en cinco pilares:

-          El monoteísmo. Los musulmanes creen en un Dios único y en su profeta, Mahoma. 

-          La oración cinco veces al día.

-          El ayuno en el mes de Ramadán.

-          La peregrinación a la ciudad santa de La Meca.

-          El diezmo.

El Corán es el libro sagrado de los musulmanes. Fue escrito ochenta años después de la muerte del profeta Mahoma, lo que nos prueba la existencia de una fuerte tradición oral dentro de la sociedad árabe – permitiendo la subsistencia de las enseñanzas del Islam. Para algunos autores, como Jacques Barrat, esto explica también la importancia de los medios de comunicación audiovisuales en estas sociedades en las cuales además existe un fuerte analfabetismo. Los ulemas dicen cómo hay que interpretar el Corán y la sharia. Estas interpretaciones son los hadices. No hay intermediarios entre Dios y los creyentes. Los fundamentalistas se basan en esto y desvían los textos. Sin embargo, existen ímames: es un creyente como los demás quien conoce el Corán de memoria. En realidad, hay dos ramas principales del Islam: los chiítas y los sunnies. Para los sunnies, no hay clérigo, sólo el ímam. Al contrario, para los chiítas, existe un clérigo muy jerarquizado cuyos puestos más altos son el mullah y el ayatolá.

 

El islamismo, según la definición de Wikipedia: “es el nombre que recibe un conjunto heterogéneo de doctrinas y prácticas políticas que básicamente defienden el Islam no sólo como religión sino como base para regir las esferas económica, política y social del Estado. El islamismo no es, por tanto, un movimiento de carácter religioso sino político. De ahí que la mayor parte de los escritos islamistas no traten sobre religión sino sobre ideología política[41].” Lo que caracteriza el islamismo es la voluntad de un retorno a las bases del Islam para la organización social. En este sentido, a menudo se confunde islamismo con fundamentalismo o integrismo que son distorsiones fanáticas y pueden conducir a actos terroristas.

 

Estos tres términos –islamismo, integrismo, fundamentalismo – designan un mismo enfoque que busca influir sobre la sociedad y las instituciones, de manera pacífica o no, para restablecer la sharia[42]. No obstante, existe un islamismo moderado cuyo objetivo es el establecimiento de una democratización en el mundo árabe. De hecho, el islamismo es muy diverso y tiene numerosas facetas. Así, “pretenden conquistar a la opinión pública de los países musulmanes por medio de una acción social. De una eficacia limitada, las redes de ayuda mutua destinadas a remediar el paro y la pobreza, así como la carencia de servicios sociales, contribuyen no obstante a mantener su influencia, especialmente entre los jóvenes, primeras víctimas de las crisis económicas[43].”

 

Entonces, ¿por qué esta distorsión actual en los medios de comunicación? Para Olfa Lamloum, “a partir del año 1969, el Islam político se impone de manera progresiva en el espacio urbano y en los movimientos de contestación dentro del mundo árabe, que encarnan a menudo una nueva versión del anti-imperialismo. Con el sostén de las elites occidentales, para las cuales el islamismo encarna un nuevo « peligro verde»[44], las elites árabes al poder optarán por su criminalización y su diabolización sistemática[45].” Con los atentados del World Trade Center, se asocian aún más las palabras islamismo y terrorismo.

 

Antes de abordar la postura de Al-Yazira respecto al islamismo, queremos definir otro concepto que también permite la distinción de Al-Yazira en el espacio mediático árabe: el panarabismo.

 

Olfa Lamloum escribe que se observa estos últimos años una resurrección del panarabismo[46]. El panarabismo quiere realizar la unidad del mundo árabe sobre una base política y cultural. Entre sus avatares, encontramos el partido Baas, que nació en Siria en los años 1940, y sigue siendo dominante en este país, y el nasserismo, que fue instaurado en Egipto por los Oficiales libres en los años 1950. Los nacionalismos panárabes, panturcos, paniraníes, etc., y los nacionalismos locales (egipcio, marroquí, tunecino…) están denunciados por los islamistas como la negación de la Umma y del universalismo musulmán.

 

Islamismo y panarabismo tienen los mismos orígenes pero sobre todo reflejan un malestar profundo en las sociedades árabes y musulmanas. Expresan el rechazo de lo que impusieron las potencias coloniales occidentales no sólo en el período de la guerra fría, sino también hoy en día, con un neocolonialismo cultural y un imperialismo estadounidense cada vez más fuertemente denunciado. Como vector de cultura, los medios de comunicación  deberían reflejar estos movimientos y es lo que Al-Yazira hace. Basándonos en dos ejemplos evocados por Olfa Lamloum en su obra, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe,  mostraremos cómo Al-Yazira plantea las cuestiones del islamismo y del panarabismo en sus programas. Estos dos ejemplos son la guerra civil de Argelia y el conflicto israelo-palestino.

 

C.    La guerra civil de Argelia: otra visión del islamismo

                                                     

La guerra civil argelina fue un conflicto armado entre el gobierno argelino y diversos grupos islamistas que empezó en diciembre de 1991. Las hostilidades empezaron cuando el gobierno anuló las elecciones tras la primera vuelta del escrutinio que presagiaba una victoria del Frente Islámico de la Salvación (FIS), con el temor que este grupo pusiera fin a la democracia.

 

Tras la prohibición del FIS y la detención de miles de sus miembros, emergieron varios grupos de la guerrilla islamista que empezaron una lucha armada contra el gobierno. Se constituyeron distintos grupos armados entre los cuales están, el Movimiento Islámico Armado (MIA), asentado en las montañas, el Grupo Islámico Armado (GIA), basado en las ciudades o la Armada Islámica de la Salvación.

 

Este conflicto se concluyó en 2002 con la victoria del gobierno, seguida por la redición de la Armada Islámica de la Salvación y la derrota del GIA. Sin embargo, en algunos sectores continúan los combates. Se estiman las pérdidas humanas a 100 000 personas.

 

Aunque no ha podido cubrir este conflicto, ya que todavía no existía, Al-Yazira forma parte de los pocos medios de comunicación árabes que contestan la versión oficial del conflicto, aplicando su lema, “la opinión y su contrario”. No sólo pueden expresarse todos los protagonistas del conflicto en Al-Yazira sino también “la narración del conflicto lleva en sí una postura explícita de la cadena[47]”.

 

Si el presentador de La sharia y la vida, Youssef Al-Qaradawi, condena el recurso a la violencia y denuncia el terror, la tortura y los crímenes, para él, el punto de partida del conflicto es la intervención del ejército para impedir la segunda vuelta de las elecciones y así impedir una victoria del FIS. Entonces, “considera como determinante la responsabilidad de las autoridades argelinas en la guerra civil y las masacres masivas[48].” El análisis de Al-Qaradawi es el siguiente: refuta el argumento de la defensa de la laicidad y de la democracia sostenido por el gobierno. Pero también guarda la distancia con el FIS, que juzga incapaz de imponerse pacíficamente: el FIS no tenía bastante fuerza para perdurar en el campo político argelino.  “Condena del golpe de Estado de enero de 1992, afirmación de la responsabilidad primaria del ejército en la guerra civil argelina, crítica virulenta del GIA y de su violencia ciega, y puesta de relieve del desconcierto del FIS[49]”  son los elementos que sirven de cuadro político e ideológico para Al-Yazira.

 

Desde el punto de vista del gobierno argelino, toda acusación hacia el ejército no puede ser sino un complot islamista. Sin embargo, las intervenciones de varias personalidades, dirigentes y militares argelinos en los programas de Al-Yazira sólo confirman la postura de la cadena, a saber que las masacres no sólo fueron la acción de grupos islamistas ávidos de sangre sino también muestra la implicación del ejército.

 

Olfa Lamloum subraya que Al-Yazira se esmera en trivializar el islamismo presentándolo como un movimiento político cualquiera, para ella:

“A pesar de su heterogeneidad y de su fracaso frente a la represión en numerosos países, el Islam político permanece sin lugar a dudas al movimiento de oposición organizado más importante. La presencia de personalidades islamistas en Al-Yazira no hace más que reflejar este peso. Otros movimientos de pensamiento menos organizados y más marginados también están presentes en las ondas qataríes[50].”

 

D.    Al-Yazira y la cuestión palestina: una cadena panárabe

                                                                                                             

El conflicto israelo-árabe nació en Oriente Próximo después del fin del mandato británico en Palestina, entre los Estados árabes y la población árabe de Palestina por una parte, y por otra parte la población judía sionista y luego, el Estado de Israel. Este conflicto engendra numerosas problemáticas:

-          la problemática de los palestinos y más precisamente la cuestión de los refugiados palestinos y sus reivindicaciones nacionales;

-          la frustración del mundo árabe ante las sucesivas derrotas y el problema palestino;

-          la aparición a finales de los años 1960 de grupos activistas palestinos organizados que cometen atentados y toma de rehenes en el mundo entero;

-          la exacerbación del sentido nacional palestino que nació en los años 1920 pero que nunca fue concretado en la creación de un Estado;

-          el control de los lugares sagrados de Jerusalén;

-          la instrumentalización del conflicto por parte de los países árabes y musulmanes no directamente implicados en el conflicto así como grupos activistas no palestinos;

-          el no reconocimiento del Estado de Israel e la inestabilidad que resulta de ello;

-          la concentración de la política internacional de varios países sobre el conflicto israelí-árabe y el problema palestino[51].

 

La mediatización de este conflicto por parte de Al-Yazira difiere de la de los demás medios de comunicación árabes: por primera vez, una televisión panárabe da la palabra no sólo a dirigentes judíos (prohibidos en las cadenas hertzianas árabes) sino también crea una apertura sobre la sociedad israelí, lo que provoca tensiones en ambas partes.

 

¿Cuáles son los factores que permiten a Al-Yazira abordar de manera tan original la cuestión israelo-palestina? En primer lugar, dando la palabra a todos los protagonistas implicados en este conflicto, Al-Yazira no hace más que seguir aplicando su lema, “la opinión y su contrario”. Pero más allá de su voluntad de objetividad, hay que subrayar que tiene el respaldo del gobierno qatarí quien también tiene una política original hacia Israel.

 

En efecto, según las palabras de Olfa Lamloum, Qatar tiene una política más agresiva de búsqueda para la solución en el conflicto: las relaciones entre Doha y Tel-Aviv son bastante privilegiadas. Desde su llegada al poder, Cheikh Hamad lleva una política de apaciguamiento y desempeña un papel vanguardista en la región[52]. Como lo escribía la periodista Françoise Sellier, en 1997:

“[…] los Estados Unidos cuenta con la línea política general seguida por el ministro de los asuntos exteriores, Cheikh Hamad Bin Jassem Bin Jabr Al-Thani: líder del acercamiento con Tel-Aviv, este último transformó su país en un instrumento insustituible de una eventual normalización israelí con los Estados árabes del Golfo[53].”  

 

Gracias a la política de su país, la cadena de televisión por satélite qatarí ha podido “abrir un despacho en Ramallah, tener un corresponsal en Israel y obtener visados y acreditaciones para sus periodistas[54]”.  Al-Yazira contribuye a la “trivialización” del problema israelí, como lo pone de relieve Olfa Lamloum. Pero no sólo es por eso que la televisión qatarí se distingue en el espacio mediático árabe: también la cadena y su visión del conflicto permitieron la aparición de uno de los actores anteriormente desapercibido figura, los palestinos de Israel, su sufrimiento y su lucha.

“Gracias a su jerarquización temática, la elección de sus periodistas, de palabras, de imágenes y de actores políticos, Al-Yazira produjo un sentimiento de proximidad y de identificación con la víctima palestina nunca alcanzado hasta entonces en el mundo árabe[55].” 

 

Esta proximidad con los palestinos hace de la cadena un actor indirecto de las negociaciones con Israel. Además suscita la crítica de numerosos países y telespectadores árabes que denuncian el hecho de que Al-Yazira “pacte con el enemigo”. Siendo a la vez buen alumno por los Estados Unidos, traidor por los árabes, escaparate para los israelíes, portavoz de la causa palestina, ¿Al-Yazira sufre de esquizofrenia? Como lo pone de relieve Olfa Lamloum, las contradicciones son numerosas:

“Al reconocer al mismo tiempo Israel y la legitimidad de la lucha armada contra este Estado, al defender el liderazgo de Arafat y discutir su gestión corrupta y antidemocrática, las contradicciones son numerosas en el fondo del conflicto de Al-Yazira sobre el conflicto israelí-palestino. Pero reflejan la complejidad de la realidad y coinciden con el sentimiento popular. Eso explica la importancia de la cadena en las estrategias de comunicación de Israel y de la Autoridad palestina, pero también las intimidaciones y las presiones que Al-Yazira sufre[56].”

 

La cobertura de Al-Yazira de la causa palestina contribuyó a su éxito en los países árabes y musulmanes antes de empezar a ser famosa en Occidente: Al-Yazira crea una “Umma por satélite[57]” dice el periodista del periódico Le Monde, Gilles Paris. Destacamos numerosos ejemplos de posturas originales de Al-Yazira: trivializa el islamismo, presentando al Hezbollah libanés como un partido político cualquiera, pero critica el estatuto de la mujer en la visión islamista. Todos estos ejemplos sólo muestran que Al-Yazira verdaderamente es la voz del mundo árabe. Es una cadena panárabe que se esfuerza por expresar todas las voces: las que el mundo considera como buenas y las consideradas como malas.

 

II.                 Al-Yazira, CNN del mundo árabe

                          

La difusión de Al-Yazira por satélite da a la cadena qatarí una dimensión internacional. Para muchos observadores, Al-Yazira es la CNN del mundo árabe (¡a pesar de que la cadena preferiría estar comparada con la BBC!). Traspasa las fronteras y se hace el eco de las tendencias árabes en el mundo “occidental”. El profesor de comunicación de la universidad americana del Kentucky, Adel Iskander, declara que Al-Yazira trajo en Medio Oriente el “efecto CNN”. Para él, la red Al-Yazira fue inspirada por el éxito de CNN International. Ambas cadenas han conocido el éxito después de la cobertura de un conflicto, la guerra del Golfo para CNN International, la guerra de Afganistán para Al-Yazira.

 

La comparación de Al-Yazira con su hermana americana es frecuente en los medios de comunicación. Por consiguiente, a continuación presentaremos brevemente la cadena de información continua americana y abarcaremos las implicaciones de la globalización de la información.

 

A.     CNN International: la globalización de la información

                       

Cable News Network fue creada en 1980 por Ted Turner. Al principio era simplemente una cadena nacional.  Pero en 1985, Ted Turner lanza CNN International. Hoy existen tres cadenas: CNN Domestic y CNN Headlines News,  dirigidas al público estadounidense, y CNN International, dirigida a un público global. En julio de 2000, CNN International, contaba con un centro de producción en Londres y treinta y cinco despachos instalados en los cinco continentes.

 

Cuando fue creada, CNN International se distinguía de los demás medios de comunicación por dos características: el directo y la información en continuo. Esta cadena une a estos dos elementos un tercero, a saber una audiencia internacional. Con la aparición de CNN International nacen un nuevo tipo de periodismo y una nueva relación entre los telespectadores y el tiempo mediático. Es decir que aparece una obsesión por la compresión del tiempo: los eventos están difundidos en tiempo real, lo que implica una nueva definición de esta misma realidad.

 

Es una búsqueda permanente de la simultaneidad: se intenta reducir cada vez más la discontinuidad que existe tradicionalmente entre el momento en que se produce el evento y el momento en que este evento es relatado[58]. Como lo demuestra el investigador Andrea Semprini, el directo instaura un proceso circular en el que el evento parece ser a la vez un punto de partida y de llegada, lo que implica un nuevo peligro: el hecho de ser manipulados por los eventos. Una buena ilustración de esta manipulación es el falso osario de Timisoara a finales de los años 1989. 

 

La búsqueda de simultaneidad está acompañada por la búsqueda de objetividad: el objetivo de la difusión en directo es también de hacer creer al telespectador que lo que está viendo es la realidad y que no existen intermediarios: se nos hace creer que son imágenes que surgen de la realidad y no se ha decidido mostrarlas.

 

Sin embargo, en el caso de CNN International como en el de Al-Yazira, existe una construcción mediática que refleja una cultura, una voluntad editorial:

“La información es no obstante diferente de un producto industrial cualquiera, porque es por esencia un artefacto cultural. En su trabajo de elaboración, en su fabricación, cristaliza una versión de la realidad que incorpora una perspectiva […], valores, en resumen, una visión del mundo[59].”

 

 

 

B.    Al-Yazira: el efecto CNN en el Medio Oriente

 

Las dos cadenas tienen una vocación global mientras, como lo muestra Andrea Semprini, CNN International es el vector del “Mc Dream” en un “Mc World”. El Mc World es, según Benjamín Barber, citado por Andrea Semprini en CNN et la mondialisation de l’imaginaire, un conjunto de valores, un sistema de referencia, compartido a diferentes grados por todos los países occidentales y/o industrializados.  En este Mc World, CNN International pretende:

“producir una información globalizada mientras que en realidad, se esmera en generalizar un punto de vista particular. La noción de información globalizada es teóricamente confusa y empíricamente frágil. Presupone una audiencia planetaria que no existe. Si, en cambio, adoptamos una mirada de tipo culturalista sobre la información producida por CNN, podemos constatar que [CNN] engendra un potente dispositivo simbólico, encargado de vehicular un modelo social, un modelo cultural, un modelo económico, en resumen, un mundo positivo y atractivo. Se trata en otros términos de un verdadero proyecto de hegemonía cultural[60].” 

 

La pregunta es la siguiente: ¿Al-Yazira persigue los mismos objetivos a pesar de ser una cadena en árabe? Al-Yazira se dirige a una comunidad de lengua árabe diseminada en todo el planeta y en este sentido también es un medio de comunicación global. Por otra parte, como lo hemos visto ya en este trabajo, se hace el eco de todas las voces del mundo árabe. Quizás en el caso de Al-Yazira no se puede hablar de un “proyecto de hegemonía cultural”, sino más bien de un contrapeso a una información que antes sólo reflejaba un punto de vista occidental. Al-Yazira es la reivindicación de un punto de vista árabe.

 

 

C.    ¿Es Al-Yazira un medio de comunicación alternativo?

 

Como tal, ¿es Al-Yazira un medio de comunicación alternativo? Intentaremos definir lo que es un medio de comunicación alternativo, apoyándonos en un artículo de Adel Iskandar[61]. Según este artículo, las características de los medios de comunicación clásicos y dominantes son las siguientes: son monolíticos, centrados en los beneficios económicos y tienen una organización jerárquica.

 

Al contrario, en primer lugar, un medio de comunicación alternativo tiene valores que tienden a girar en torno a los ideales de participación democrática de ciudadanos movilizados. Además,  tiene una responsabilidad hacia los movimientos sociales y al mismo tiempo son relacionados a ellos. Para Adel Iskandar, si Al-Yazira se hace el eco de las críticas del público árabe hacia sus gobiernos, no parece haber adoptado las ideologías de un movimiento social en particular. Permite a los islamistas expresarse en sus ondas pero no se declara cadena islamista por lo tanto. Al contrario, como lo refleja su lema “la opinión y su contrario”, Al-Yazira es la voz de todas las tendencias.

 

En segundo lugar, los medios de comunicación alternativos suelen distanciarse de los ideales “elitistas” profesionales de los medios de comunicación generales y tienen una estructura no jerárquica. Funcionan según un modelo de organización “colectiva”. Estas características no pueden ser aplicadas a Al-Yazira: la mayoría de sus periodistas fueron formados por la BBC como ya lo vimos en nuestra primera parte.  Su organización y planning son iguales a los de las grandes redes. Además, la diversificación de Al-Yazira en el campo del deporte o de los programas infantiles es más bien característica de las grandes empresas que de los medios alternativos, que a menudo sólo viven del respaldo de su público y ni siquiera disponen de ingresos publicitarios. 

 

Por fin, los medios de comunicación alternativos tienen una agenda percibida como “contra hegemónica” y son instituciones de “contra información”. Por la misma razón que Al-Yazira no está comprometida con un movimiento social en particular, tampoco es una institución de contra información: Al-Yazira busca un equilibrio en el que todas las tendencias son representadas, incluso en punto de vista de las potencias percibidas como hegemónicas.

 

Entonces, según el análisis de Adel Iskandar, la percepción de Al-Yazira como medio alternativo es más bien el resultado de una “autoproclamación” como tal. En realidad, la imagen de Al-Yazira como medio alternativo surgió en los medios de comunicación occidentales. Pero a continuación, fue utilizada por la cadena: “[…] la alteridad, tal como está empleada por Al-Yazira, se parece a la estrategia marketing de una marca empresarial. La alteridad está fabricada por la estación para promover su imagen de proveedor de informaciones alternativo[62]”. Un ejemplo de esta estrategia es la campaña publicitaria de Al-Yazira en la cual se podía leer: “If everybody watches CNN, what does CNN watch… Al Jazeera” (Si todo el mundo mira CNN, ¿qué mira CNN?… Al-Yazira).

 

Adel Iskandar destaca una última diferencia de bulto, que impide clasificar Al-Yazira como medio alternativo, es el origen gubernamental de sus fondos. La única similitud al fin y al cabo es la línea editorial de la cadena árabe: “la narración contra hegemónica de Al-Yazira proviene de su construcción de la identidad árabe como un “otro”[63]”. 

 

Después del 11 de septiembre del 2001, este “otro” árabe sufrirá en los países occidentales de una imagen negativa, asociada con los terroristas islamistas y Bin Laden. Notamos una paradoja: el éxito de Al-Yazira en occidente tiene como punto de arranque la difusión exclusiva de videos del terrorista Bin Laden y parece que la cadena se esmera en restablecer una imagen positiva de los árabes y de los musulmanes en el mundo occidental. Por eso, en nuestra última parte, analizaremos cuál es la importancia de Al-Yazira como voz del mundo árabe en la actual geopolítica mundial.

 

 

 


Tercera parte: Al-Yazira en las Relaciones Internacionales

                                                    

            La imagen de Al-Yazira como medio alternativo es, como lo vimos en la parte anterior, la razón por la cual grupos marginados elijen esta cadena para expresarse. Es así como Osama Bin Laden eligió Al-Yazira  para mediatizar sus acciones y sus mensajes.

 

La difusión de los videos de Bin Laden después de los atentados de Nueva York del 11 de septiembre del 2001 es considerada como una primera victoria mediática ganada por Al-Yazira. Pero esta victoria, a nuestro juicio, tiene dos facetas: si, por una parte, Al-Yazira se hace famosa en el mundo entero, por otra parte, también gana su imagen de cadena de los terroristas. Por consiguiente, hemos elegido designar los videos de Bin Laden como punto de arranque o punto decisivo en la historia de la cadena qatarí. A continuación presentaremos una cronología de las apariciones de Bin Laden en Al-Yazira basándonos en las obras de Hugh Miles y Olfa Lamloum. En nuestra opinión, estas apariciones de Bin Laden marcan también el principio de una guerra mediática qua abarcaremos en un segundo apartado. Por fin, terminaremos nuestro trabajo analizando cuáles fueron las aportaciones de Al-Yazira e intentando determinar cómo será su porvenir.

 

 

 

 

 

 

I.                   Los videos de Bin Laden como punto de arranque

                   

A.     Antes del 11-S

 

Los videos difundidos después del 11-S no eran los primeros: Bin Laden ya se había expresado en varias ocasiones en las ondas qataríes. La primera vez que el terrorista apareció en Al-Yazira fue en 1998 y ya era un hombre buscado por INTERPOL por su implicación en los atentados de las embajadas americanas de Kenya y Tanzania. Hugh Miles lo subraya: Osama Bin Laden es “un especialista de la propaganda personal” que muy temprano pensó en “sacar partido de Al-Yazira[64]”. Durante una entrevista que duró casi una hora en diciembre de 1998, declaró que los musulmanes tenían el deber de hacer una guerra santa contra todos los americanos. En aquel momento, esta entrevista provocó la protestación de la embajada de Washington basada en Doha. Es esta misma entrevista que Al-Yazira decide difundir de nuevo después de los atentados del World Trade Center. En esta ocasión tendrá mucho más efecto y consecuencias.

 

No obstante, tras esta primera entrevista acordada a Al-Yazira, Bin Laden aparecerá otras veces en la cadena. Así, en junio 1999, mientras ya era un terrorista “famoso” en el mundo árabe, Al-Yazira anunció la difusión de otra entrevista exclusiva con el jefe de la red terrorista Al-Qaida. Al-Yazira hizo mucha publicidad y el mundo árabe esperaba esta nueva entrevista con el hombre que simbolizaba “el desafío al occidente[65]” con mucha excitación.

 

Pero también suscitó la oposición de los países del Golfo vecinos de Qatar. Bahrein, Kuweit y sobre todo Arabia Saudí, donde la gente podía ser encarcelada sólo por estar en posesión de reproducciones de los discursos de Bin Laden, intentaron impedir la difusión de la entrevista. Tres días antes de la difusión de la entrevista, la agencia de investigaciones americana, el FBI, colocó Bin Laden en su lista de los diez hombres más buscados y ofreció una recompensa de cinco millones de dólares para cualquier información que podía conducir a su captura. Esto aumentó la efervescencia en el mundo árabe.

 

El mensaje de Bin Laden durante esta entrevista era sencillo y violento: jihad contra los Estados Unidos. Para Arabia Saudí y Kuweit, la difusión de esta entrevista es imperdonable. En su región natal, el Hedjaz en Arabia Saudí, según la socióloga Mai Yimani[66], Bin Laden es adulado por una franja de la juventud que admira su modo de vida austero y su determinación por expulsar el ejército norteamericano de la tierra santa.  En este momento, Arabia Saudí y Bahrein tenían muchos problemas con los movimientos islamistas: la difusión de una llamada a la guerra santa por un personaje con tanta influencia como Bin Laden era una verdadera catástrofe.

 

Otros medios de comunicación habían recibido mensajes de Osama Bin Laden pero sufrían las presiones saudíes. Además, el ASBU[67], organización de  la cual Al-Yazira no forma parte, prohibía a sus miembros la difusión de informaciones que podían dañar a otro miembro: los mensajes de Bin Laden eran obviamente considerados como peligrosos.

 

Si la difusión de la entrevista contribuyó al éxito de Al-Yazira ante su público, la cadena no había pensado en todas las dificultades que le iban a crear sus dos potentes vecinos que tenían – y siguen teniendo – el control del mercado publicitario en la región. Como consecuencia a esta no sumisión al gran hermano saudí, Al-Yazira sufrió considerablemente el “embargo publicitario” de las grandes marcas que aunque no tenían nada contra Al-Yazira temían la posibilidad de perder al mercado saudí.

 

Antes del 11-S hubo dos otras apariciones de Bin Laden en Al-Yazira. En septiembre de 2000, un año antes de los atentados, la cadena qatarí transmitió un video inquietante en el cual aparecían no solamente Osama Bin Laden sino también Ayman Al-Zawahiri y Assad Allah Rahman, sus dos tenientes. Otra vez, el mensaje era violento y llamaba a pasar al acto contra Estados Unidos.

 

Por fin, en enero de 2001, un corresponsal de Al-Yazira, Ahmed Zaydan, asistió a la boda de Mohammed, el hijo de Bin Laden con la hija de uno de sus asistentes y la grabó.

 

B.    Después de los atentados del World Trade Center y del Pentágono

 

Como lo apuntábamos, son estas imágenes que suscitaron el interés internacional por Al-Yazira. Una semana después de los atentados del World Trade Center y del Pentágono, el 20 de septiembre del 2001, Al-Yazira difunde de nuevo la entrevista de 1998. Cuatro días después, el presentador de los informativos de la cadena lee un fax recibido en la sede de la cadena y firmado “Osama Bin Laden”. Los días siguientes, la prensa internacional sospecha la cadena qatarí de complicidad con el jefe de Al-Qaida y Al-Yazira se convierte en “la cadena de Bin Laden”.

 

Paradójicamente al diluvio de críticas suscitado contra Al-Yazira, abundan en Doha las demandas de cadenas occidentales que quieren comprar estas imágenes. Al-Yazira firmará entonces varios contratos con cadenas como la BBC o la CNN. Así, Bin Laden constituye para la cadena un maná financiero, bienvenido en el contexto de congelación de los recursos publicitarios por parte de los saudíes. En este momento, surge otra crítica por parte de la izquierda y de los liberales árabes. En un artículo del  periódico Le Monde, un analista egipcio de izquierda se queja de que en Al-Yazira haya: “La ilusión de una apertura y de una libertad de tono desmentida por los prejuicios, por cierto disimulados, de unos presentadores populistas y por la elección de los invitados en la cual podemos ver islamistas famosos opuestos a progresistas desconocidos[68]”.  El analista concluye: “El islamismo atrae a los telespectadores, por consiguiente, Al-Yazira vende el islamismo[69]”. Según este analista, difundir los mensajes de Bin Laden sólo formaría parte de una estrategia comercial de la cadena qatarí.

 

Incluso Olfa Lamloum pone de énfasis el hecho de que pueda existir cierta coincidencia de intereses entre la cadena y el terrorista. Pero a la cuestión de la complicidad de la cadena con Al-Qaida, la respuesta de la profesora de universidad francesa es categórica: Al-Yazira no es la cómplice de Bin Laden. En su opinión: “La cadena qatarí fue uno de los pocos medios de comunicación en resistir a la visión estadounidense de este hombre […] como la encarnación del mal […]”. Fiel a su lema “La opinión y su contrario”, la cadena consideró que Bin Laden era una de las partes implicadas en un conflicto internacional: su punto de vista merecía ser expuesto de la misma manera que el punto de vista de sus adversarios. Al-Yazira se negaba en ocultar las intervenciones de Bin Laden por que para ella esto significaba adoptar el punto de vista oficial de los Estados Unidos y por consiguiente ocultar una faceta del conflicto a sus telespectadores árabes. Es así como empezó una verdadera guerra mediática entre los Estados Unidos y Al-Yazira.

 

II.                 La guerra mediática

 

El 11 de septiembre del 2001, el mundo asiste en directo a la colisión del segundo avión en las torres del World Trade Center, filmado por una cámara automática de CNN. Esta perfecta puesta en escena, muy fotogénica, fue sin duda la obra de Bin Laden: el especialista de la propaganda quería que fuera la cadena más representativa del país que mostrara al mundo el principio de la jihad[70]. El terreno estaba preparado para una guerra tanto al nivel militar como al nivel mediático. Los medios de comunicación iban a ser un instrumento muy importante en este conflicto.

 

A.     La contestación de un orden de la información impuesto por los Estados Unidos

 

Tanto en la cobertura de la guerra de Afganistán como en la de la guerra de Irak, Al-Yazira mostró una firme voluntad de diferenciarse del punto de vista “oficial”. En Agosto del 2000, la cadena qatarí ya estaba considerada como “la cadena árabe que molesta[71]”. Ante las numerosas quejas que venían no sólo de los diferentes países pero también de ciudadanos molestados por la libertad de tono de la cadena, el entonces director de la cadena ya respondía que existía un derecho a responder. Además, ante las repetidas presiones al jefe de estado, una personalidad oficial sólo contestó que al emir no le gustaba que intentaran intimidarle[72].

 

Pero es cuando empezaron los bombardeos estadounidenses en Afganistán que Al-Yazira se convirtió en un peligro para la Casa Blanca. Beneficiaba de la enorme ventaja y la exclusividad de cubrir el conflicto desde Kabul y proponía una versión muy diferente de los eventos de la de los americanos. Éstos se empeñaban en desmentir todas las informaciones dadas por Taysir Alluni, el corresponsal de Al-Yazira en Kabul, sobre todo cuando se trataba de muertos civiles afganos o, peor, de pérdidas norteamericanas. A partir de entonces, Al-Yazira está clasificada como “medio de propaganda de los terroristas” por Washington. La Casa Blanca intenta hacer que su enemigo, Bin Laden, “sea inaudible en Estados Unidos mientras prepara una ofensiva mediática en el mundo árabe[73]”.

 

La Casa Blanca ha establecido en este nuevo periodo de guerra una estrategia mediática escandalosa « la censura », es sorprendente como en un país donde se resalta en la primera  enmienda de su constitución la libertad de expresión, los medios sean sujetos hacer a tal represión. Así, el gobierno estadounidense pidió a los medios de comunicación nacionales de no reproducir en su integridad los mensajes de Bin Laden comprados a Al-Yazira, poniendo un fin a las disputas para la explotación de las imágenes de la cadena árabe. En efecto, CNN había firmado poco después de los atentados del 11-S un contrato de abastecimiento prioritario con la filial de Al-Yazira, News Gathering. Pero este contrato no fue respetado por la CBS, la NBC y la Fox, que por ser también dependiente de la fuente única que representaba Al-Yazira, decidieron retomar la señal satelitaria de la cadena en directo.

 

Washington expuso durante una conferencia que tuvo lugar el 08 de octubre del 2001 dos motivos para imponer a sus medios de comunicación la censura: en primer lugar, la violencia del contenido de estos mensajes, y en segundo lugar, la posibilidad de que contuvieran códigos secretos destinados a otros terroristas. Aunque el FBI no encontró ninguno de estos códigos secretos, el motivo fue suficiente para convencer a las cinco grandes redes de televisión norteamericanas, ABC, CBS, NBC y MSNBC, CNN y la Fox. Con una “preocupación patriótica”, todas aceptaron sacrificar la sacrosanta libertad de prensa. Los periodistas de Le Monde recogieron los comentarios de dos dirigentes de estas cadenas. Neal Shapiro, director de la información de la NBC explicó: “Somos periodistas pero también ciudadanos responsables. No vamos a poner el país en peligro.” Otra reacción patriótica, la de Roger Ailes, director de la información de la Fox News: “No vamos a preocuparnos de problemas de concurrencia mientras se trata de la seguridad de los Estados Unidos y de la vida de los americanos[74].”  

 

A partir de entonces, los mensajes de Bin Laden fueron analizados y depurados de sus pasajes más violentos hacia los Estados Unidos por los responsables de las cadenas norteamericanas antes de su difusión. Además, las cadenas acompañaban las imágenes por comentarios y reportajes. El resultado de la autocensura de los medios de comunicación fue la casi desaparición de Bin Laden de las pantallas americanas.

 

Sin embargo, por la presencia de Al-Yazira en Afganistán, los Estados Unidos se sentía perjudicados en la guerra de propaganda que había empezado. Entonces, abrieron unos “Coalition Information Centers” en Islamabad y en Londres. Por añadidura, reclutaron a Charlotte Beers, la ex patrona de la empresa publicitaria Ogilvy & Mather, más conocida por la promoción de los champúes y el dentífrico,  para vender la “marca” Estados Unidos en un mundo que le era mayoritariamente hostil[75].

 

Tomando en cuenta todos estos esfuerzos de la Casa Blanca para ocultar una parte de la verdad a sus ciudadanos, compartiendo el punto de vista del profesor de la New York University, Eric Klinenberg, podemos interrogarnos si ciertas empresas mediáticas no representan un peligro por la paz mundial. Según el profesor, “desde el 11 de septiembre del 2001, la desinformación de los hechos por los periodistas contribuyó a un apoyo popular a la guerra[76].”  Eric Klinenberg da como ejemplo de esta desinformación los resultados de una encuesta realizada por la Universidad del Maryland en octubre del 2003. El 60% de los americanos – y el 80% de los que miran la Fox News – creían al menos una de estas tres mentiras:

1-     Se descubrió armas de destrucciones masivas en Irak.

2-     Existen pruebas de una alianza entre Irak y Al-Qaida.

3-     La opinión pública mundial sostiene la intervención militar americana en Irak.

 

El autor añade que estas manipulaciones tienen como consecuencia la legitimación de la política de George W. Bush y de su imagen ante el posible rechazo electoral de los norteamericanos. En Estados Unidos, la fuerte concentración de las empresas mediáticas entre las manos de unos hombres potentes es la consecuencia de una gran desregulación del sector audiovisual durante la administración Clinton. Esto conduce a la situación actual:”los órganos de prensa cooperan con el Pentágono para suavizar la guerra[77].”

 

En este contexto, el papel de Al-Yazira fue primordial no sólo en el mundo árabe sino también al nivel internacional. Las imágenes de la cadena permitieron echar luz sobre las incoherencias y los abusos de los Estados Unidos. También expresaban el punto de vista árabe sobre el conflicto. Un conflicto que los Estados Unidos se esforzaban por despolitizar a pesar de que el acto terrorista de Al-Qaida tenía motivos políticos.

 

Poco a poco, los Estados Unidos se dió cuenta de la necesidad de controlar este punto de vista árabe para poder ganar la guerra. A partir de esta toma de consciencia,  Al-Yazira y la “calle árabe” van a ocupar cada vez más importancia en la estrategia norteamericana.

                        

B.    La toma de consciencia de la existencia de una opinión pública árabe

                                                                                                 

Paralelamente al establecimiento de una censura nacional, “la Casa Blanca trata de intensificar su mensaje en dirección del mundo musulmán con la esperanza de corregir su imagen en este sector[78]”. Por consiguiente, el gobierno estadounidense va a tener un interés nuevo por Al-Yazira, una cadena que hasta entonces intentaba hacer callar. En octubre del 2001, la embajada americana de Doha protestaba contra la “retórica incendiaria” de la cadena y la acusaba de favorecer un sentimiento anti americano en la región[79].

 

Cabe precisar que en aquel momento, la política de Bush descansaba en una postura maniquea, a saber “con nosotros o en contra.” Los países que no sostenían la política americana estaban considerados como enemigos. Y los que emitían críticas también. Se comprende mejor el esfuerzo por contar con Al-Yazira en los rangos amigos. La administración Bush había entendido el alcance que tenía la cadena qatarí en el mundo árabe. Por eso, los oficiales estadounidenses no vacilarán en acordar entrevistas a Al-Yazira: Condolezza Rice, Donald Rumsfeld y el general Richard Myers aceptan contestar a las preguntas de los periodistas de la cadena árabe. Como lo pone de relieve el periodista Tewfik Harem: “Durante la guerra, los expertos americanos atentos entienden que la cadena no sólo es el único medio de comunicación creíble en el mundo árabe, sino también una de las pocas ventanas de la democracia en esta parte del globo[80].”

 

Condolezza Rice decide cultivar buenas relaciones con la cadena qatarí y sus dos corresponsales en Estados Unidos, Hafez Al-Merrazi y Mohammed Al-Alami. Incluso podrán acceder sin ningún problema al campo de Guantánamo apenas concluido el conflicto.

 

Sin embargo, existe un reverso de la moneda de este nuevo interés: la cadena qatarí recibirá más presiones por parte del gobierno estadounidense. A pesar de que proclama la libertad de informar, Al-Yazira tendrá que ceder a algunas de las exigencias americanas para conservar su libertad de estilo. En nombre de la amistad que existe entre Qatar y Estados Unidos (cabe recordar que es en Qatar donde está establecida la más grande base militar americana en el Golfo), los videos de Bin Laden deberán ser vistos por expertos americanos antes de su difusión por Al-Yazira.

 

Hay un precio que pagar para esta “traición” a sus telespectadores. Dos veces, los arreglos de la cadena con el gobierno, cuya política está frecuentemente criticada en sus propios programas, serán revelados. La credibilidad de la cadena está cuestionada por una parte de la prensa árabe. Además: “la cadena qatarí pierde también el monopolio de los videos de la célula de propaganda de Al-Qaida, Essihab. A partir de entonces, sus competidoras árabes MBC (saudí) o la nueva cadena privada del emirato vecino Abu Dhabi obtienen unos scoops en los medios de los activistas islamistas[81].”

 

Censura para los medios nacionales y para Al-Yazira de un lado, y de otro lado, la seducción: otra cara de la estrategia de Estados Unidos en Oriente Medio es la creación de la televisión,  Al-Hurra, que presentamos en la primera parte de este trabajo entre las competidoras actuales de Al-Yazira. Tewik Harem recogió las reacciones en los países árabes cuando se anunció la llegada de una cadena americana en árabe. En su artículo, un editorialista egipcio declara: “Los americanos actúan en el frente mediática como en el frente militar. Tienen los medios para ocupar el terreno pero no necesariamente de hacerse entender o de hacerse comprender[82].” En el mismo artículo, otro periodista califica la acción americana como “Plan Marshall de los cerebros”.

 

Después de los atentados de Nueva York y durante las guerras de Afganistán y de Irak, los Estados Unidos se da cuenta de que ya no controlan la información mundial y que existe una opinión pública árabe. Dominique Wolton, investigador en comunicación en el  centro nacional de la investigación científica francés (CNRS), explica cómo los atentados del 11 de septiembre contribuyeron a una toma de consciencia de los efectos negativos de la globalización de la información:

“Fue la representación americana del mundo que dominó durante veinte años en Oriente Próximo con [los conflictos de] Irán, Irak, Palestina, Líbano… creando una humillación mediática, ampliamente sobre-evaluada. Los medios de comunicación americanos, simbolizados por una CNN triunfante, cubrieron los eventos en Oriente Próximo para su opinión pública. El drama es que aquellas imágenes y aquellas informaciones también estaban recibidas allá y chocaban. La diversidad de las culturas y de las ideologías existe. Sobre todo en información y comunicación[83].”

 

Como lo analizamos en nuestra segunda parte, Al-Yazira es la mayor manifestación de la existencia de una opinión pública árabe. De allí su importancia en las relaciones internacionales, aunque la cuestión de la importancia que cabe acordar a la opinión pública en la formulación de las políticas exteriores no está bien determinada. Es una de las cuestiones que suscita controversias en la teoría y en la práctica de las relaciones internacionales[84]

 

Al-Yazira se convierte en un actor de mayor importancia dentro de las relaciones internacionales ya que los medios de comunicación son componentes de la estrategia de los Estados y pueden convertirse en fuentes de poder o en armas potentes. Al igual que las empresas que venden su producto al público por medio de mensajes publicitarios a la televisión, los Estados venden su imagen por medio de las cadenas transnacionales e internacionales. ¡Eso lo entendieron los Estados Unidos que no vaciló en contratar a una especialista de la publicidad para su comunicación! Henry Bakis, en Géopolitique de l’information, en 1987, ya subrayaba el papel de los medios de comunicación en la geopolítica mundial:

“La importancia del control de la información aparece como fundamental hoy en día. Esto es la verdad en la conducta de las relaciones internacionales, en las cuestiones relativas a la paz o a la defensa[85].” 

 

Al-Yazira, la cadena en árabe qatarí tiene la voluntad de inscribirse cada vez más en medio de la comunicación global. Por eso, en nuestro último apartado, veremos cuáles son las aportaciones de la cadena y cómo se configura su porvenir. 

 

III.              Aportaciones y porvenir de Al-Yazira

 

A.     ¿La democracia en Oriente Medio?

 

            Al-Yazira suscitó la curiosidad, la controversia, la contestación, la protestación en todos los lugares donde difundía. Pero, podemos preguntarnos, ¿cuáles fueron los cambios que propició la aparición de la cadena qatarí?

 

En primer lugar, Al-Yazira permitió como lo vimos en la parte anterior una nueva visión de la opinión pública árabe en el mundo entero. En la propia región del Golfo y en los demás países árabes y musulmanes la posibilidad de expresarse tan libremente era una novedad. Rápidamente sopló el viento de una nueva esperanza: la del establecimiento de la democracia en esta región del mundo. Numerosos son los expertos que declaran imposible conyugar democracia e Islam. Sin embargo, con la llegada de Al-Yazira:

“En Occidente, la idea de que la liberalización de los medios de comunicación árabes prefigura cambios políticos y sociales de mucha envergadura en Oriente Medio adquirió la fuerza de un artículo de fe. Los más optimistas pronostican que la televisión por satélite va a eliminar los obstáculos tradicionales al progreso y resolver todos los problemas que hasta entonces han sido insolubles, y el resultado de todo eso será una especie de « glasnost » islámica[86].”

 

Sin embargo, el periodista Hugh Miles subraya en su libro, Al-Jazira. La chaîne qui défie l’Occident que la situación actual del mundo árabe no es la consecuencia de un déficit de información. Al contrario, pone de relieve el hecho de que unos analistas prevean un efecto inverso:

“Los análisis más oscuros sostienen incluso que la revolución de la información podría en realidad consolidar la influencia de los regímenes los más opresivos sobre los pueblos; los ciudadanos dan rienda suelta a sus frustraciones en el marco de los talk-shows de Al-Yazira, mientras el verdadero poder permanece entre las manos de la misma oligarquía[87].” 

 

Pero, Al-Yazira sigue representando una gota de esperanza en un océano de oscurantismo[88], como lo declara uno de sus periodistas.

 

 

B.    El periodismo según Al-Yazira

 

            Si no es cierto que la cadena qatarí pueda permitir tales cambios políticos en la región, sí introdujo una verdadera revolución en el periodismo de los países árabes y musulmanes. En efecto, la creación de Al-Yazira por el gobierno qatarí suscitó la inquietud de sus vecinos que poco a poco entendieron que para recuperar a su público era necesario copiar la libertad de Al-Yazira. Como lo subrayan Mohammed El-Nawawy y Adel Iskandar, autores de How the Free Arab Network Changed the World and Scooped the Middle East: “Al-Yazira heredó no sólo de una gran parte del equipo de la antigua cadena árabe de la BBC sino también su espíritu editorial, su libertad y su estilo[89]. “ 

 

Los dirigentes de la cadena son conscientes de la revolución que contribuyeron a hacer. Y quieren ir más lejos. Los proyectos del grupo Al-Yazira son numerosos. El periodismo árabe no debe faltar de las herramientas básicas del periodismo occidental: ratings, formación, producción, etc., todo debe producirse a nivel local y Al-Yazira quiere ser el punto de partida de esta cadena. Pero el proyecto que se destaca es el de crear una cadena en inglés: Al Jazeera International.

 

C.    Al Jazeera International: un nuevo desafío 

                                                                                       

            Sería la primera cadena en inglés basada en Medio Oriente: Al Jazeera International es el desafío loco que quieren aceptar los dirigentes de la cadena por satélite qatarí. El proyecto es el reflejo de las grandes ambiciones de la cadena. La fecha del lanzamiento de la cadena ha sido aplazada varias veces este año pero por fin, deberíamos ver las primeras imágenes en septiembre.

 

El director de la cadena es Nigel Parsons, un periodista británico que trabajó para la BBC  y WTN. Declaró a los periodistas de Le Monde que su cadena empleará entre 200 y 250 periodistas. Serán repartidos en los despachos que compartirán con sus colegas de Al-Yazira[90]. Las dos cadenas pondrán en común sus medios pero intentando conservar su autonomía en cuanto al tratamiento de la información. La originalidad de Al-Yazira International es que la difusión de sus programas será descentralizada en cuatro ciudades: Doha, Londres, Washington y Kuala Lumpur, ¡”siguiendo el sol”! 

 

Todavía existen numerosas dudas en cuanto al éxito de esta cadena. Por eso, reclutaron a animadores que vienen de las más grandes redes anglosajonas: BBC, ITV,  CNBC-Europe, Sky News, CNN o ABC. El director de la cadena tiene la ambición de sorprender a su público: quiere distinguirse no sólo de Al-Yazira sino también de la BBC World y de CNN. Pero no queda muy claro, incluso para los periodistas de  Al-Yazira cuál será la línea editorial de la nueva cadena.

 

¿Quién va a ser el público de Al-Yazira International en Occidente? Los programas se dirigen principalmente a jóvenes que tienen entre 18 y 35 años y que pertenecen a la segunda o tercera generación de inmigrados. Sin embargo, el periódico Le Monde destaca las dificultades de “captar” a este público: los musulmanes británicos están acostumbrados a la BBC y en los Estados Unidos, la cadena podría sacar ventaja del descrédito que sufre actualmente CNN pero todavía no ha encontrado un operador. En el mundo árabe, los telespectadores deberían quedar fieles a la cadena que emite en su idioma.

 

Entonces, parece que el éxito de la nueva cadena está muy vinculado al de su hermana mayor. Beneficiaría de su fama: como lo enfatiza Nigel Parsons, gracias a una encuesta internacional, se determinó que la marca Al-Yazira es la quinta más influyente en el mundo, detrás de Apple, Google, Ikea y Starbucks[91].  Los periodistas de Al-Yazira temen que sus colegas de la cadena internacional, por ser mayoritariamente occidentales, no respeten el “espíritu” de la casa. No obstante, Hugh Miles opina que Al-Yazira International  no debe alejarse demasiado de su hermana porque sino se expondría a una rápida pérdida de confianza. 

 

A nuestro juicio, la cadena puede captar a numerosos jóvenes occidentales activos, que conocieron a Al-Yazira por su cobertura de los eventos que siguieron el 11-S pero que no hablan árabe y ya visitan la página Web en inglés de la cadena. La juventud europea, desde la guerra de Irak, está enfadada con la administración Bush y está ávida de tener otra visión de los eventos que ocurren en el mundo. Es decir que a nuestro juicio, ¡la cadena podría beneficiar de la mala imagen de los Estados Unidos! Además, basándonos en los buenos resultados de la página Web en inglés, podríamos avanzarnos a predecir un porvenir brillante a la futura cadena.

 


Conclusión

 

            Los periodistas de Al-Yazira salen de la sede de la cadena en Doha, muy parecida a un bunker, y se dirigen hacia una zona residencial muy protegida donde viven. Una de las presentadoras de la cadena, Khadija Bengana, de origen argelino, vive en esta residencia. En un documental realizado por el periodista Tewfik Hakem declara que no ve a las mujeres qataríes porque la sociedad qatarí es una sociedad muy cerrada. Otro periodista dice que cada mañana agradece a Dios que su coche no explotó.

 

Otra manifestación de la hostilidad y de las dudas que puede suscitar Al-Yazira es la recién detención e inculpación de uno de sus periodistas más famoso, Taysir Alluni, en España. Fue acusado de pertenecer y de participar a la financiación de la rede terrorista Al-Qaida. A pesar de que beneficiaba del sostén de gran parte de la prensa internacional, en junio de este año fue condenado a siete años de encarcelamiento. Parece que hay un precio que pagar por haber sacudido el mundo al decir “La opinión y su contrario”. Pero los periodistas están muy orgullosos de lo que han logrado.

 

La ascensión de Al-Yazira se hizo progresivamente hasta quebrantar el equilibrio mundial de la información y competir con las grandes redes anglosajonas de información. Hoy existe un “Al-Yazira’s touch”. A lo largo de este trabajo, nos hemos esforzado por destacar tanto las etapas y los ingredientes del éxito de la cadena como sus aportaciones.

 

En primer lugar, benefició de un contexto de emergencia favorable; una triple oportunidad coyuntural. La coyuntura política ante todo permitió la creación de una cadena por satélite basada en Qatar. Como lo vimos en nuestra primera parte, Al-Yazira fue la concretización de un proyecto del emir, Cheikh Hamad, que quiso dotar su pequeño emirato de los medios para alcanzar un resplandor regional e internacional.

 

Por otra parte, la coyuntura económica del país ayudó al despliegue de la cadena: Qatar es un país rico, y sin el sostén financiero del emir, Al-Yazira no hubiera podido estar a la altura de sus ambiciones. En efecto, los países de la región, en particular Arabia Saudí, pusieron obstáculos en el camino de Al-Yazira, intentando cortarle los recursos publicitarios para hacerla callar.

 

La cadena tendrá por fin la suerte de nacer en un periodo en el cual la demanda informativa por parte de la población árabe era muy fuerte. Si existían numerosas cadenas de televisión, como lo vimos en nuestra primera parte, la gran mayoría eran muy próximas y dependientes de los gobiernos árabes, procurándose así una imagen de servilismo. La mayoría de los telespectadores acogieron Al-Yazira primero con incredulidad y luego con entusiasmo.

 

Así, la cadena qatarí sedujo primero el público árabe y musulmán, y  luego conquistó una audiencia internacional. Supo hacer una acertada representación de las tensiones regionales e internacionales más próximas a las sensibilidades de los telespectadores árabes, ganándose su confianza. Al nivel mundial, adquirió su fama gracias a su cobertura de la guerra de Afganistán y luego de la guerra de Irak.

 

Gracias a Al-Yazira el mundo entero se dio cuenta de que existía otra visión que la occidental, hasta entonces dominante de los eventos. La opinión pública árabe pesaba mucho más de lo que se estimaba. No tomarla en cuenta puede significar exponerse a graves peligros, lo que aprendió los Estados Unidos a sus expensas.

 

La mejor ventaja de Al-Yazira es a nuestro juicio su equipo de periodistas: mientras continúen siendo orgullosos del trabajo que hacen, mientras su vocación a confrontar las distintas opiniones no se altere, mientras su independencia permanezca intacta, Al-Yazira seguirá conquistando cada vez más telespectadores en el mundo entero.

 

La mayor aportación de la cadena es de haber sido el eco de la opinión árabe en todo el planeta. Podemos esperar que más cadenas sigan su ejemplo y que pronto tengamos equivalentes latinoamericanos, asiático o africano…

 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Anexos


Anexo I: Citas en versión original

– Página 10 –

 

« D’après les experts, la croissance que connaît actuellement le Qatar devrait se poursuivre pendant encore plusieurs générations, voire pour les deux prochains siècles. Tant qu’il y aura des acheteurs pour le gaz du North Field, le Qatar sera riche. »  (Hugh Miles, p.16) 

 

– Página 12–

 

« Au Qatar, l’ouverture politique s’est imposée et il n’y a pas eu de réelles pressions populaires revendiquant l’élargissement de la représentation. Les réformes ont d’abord eu lieu à cause des pressions internationales et régionales. » (Rémy Leveau y Frédéric Charillon, p. 139)

– Página 13 –

 

« [Al-Jazira] aménage un espace d’expression publique panarabe pour la demande démocratique, les différentes contestations islamistes et le ressentiment vis-à-vis des Etats-Unis. » (Olfa Lamloum, p.64)

 

– Página 14 –

 

« [Le Qatar] détient les outils de ses ambitions et s’affranchit enfin de l’influence de son encombrante grande sœur l’Arabie Saoudite. » (Olfa Lamloum, p.64)

 

“Dès lors en effet que ces productions et ces technologies apparaissent comme une nécessité à toutes les nations, celles qui n’auront pas su s’en doter seront obligées de se soumettre à toutes les conditions que voudront bien dicter les nations plus avisées qui auront investi massivement dans les domaines nouveaux… Qui n’utilise pas de tels outils régresse impitoyablement, et qui les utilise sans les produire se voit soumis à une véritable exploitation économique et politique de la part des producteurs. » (J.-P Basquiat, R.Ganne, La France dans la bataille des technologies de l’intelligence, citados por Bakis Henry, in Géopolitique de l’information, p. 38)

 

– Página 21 –

 

“Although Al Arabiya is in its second year, it has managed to create top of the mind awareness for the brand has managed to build high loyalty among its viewers. Al Arabiya grid is designed to attract different segments, with different interests, at different times. Hence, making Al Arabiya the perfect channel to target all kinds of "information seekers", be it young or old, males or females, having different interests, being in politics, economy, finance, sports, science, technology, general knowledge, and so many other areas. Being an Arabic Channel whose mission is to empower its Arab viewers, makes Al Arabiya News Channel one of the top choices of Arabs seeking trustworthy and reliable information.”  (www.alarabiya.net)

 

 

 

 

– Página 24 –

 

« Deux aspects frappent le visiteur au siège de la chaîne à Doha. D’abord l’extrême exiguïté de ses studios et de sa news room. Ensuite, la fierté affichée par ses employés et journalistes d’y travailler. Al-Jazira est vécue comme une revanche sur la violence symbolique quotidienne de la narration journalistique des médias occidentaux vis-à-vis du monde arabe. » (Olfa Lamloum, p.11)

 

– Página 26 –

 

« Our team of dedicated journalists with their multinational education end diversified backgrounds share a common set of attributes : objectivity, accuracy and a passion for truth. » (www.aljazeera.net)

 

« With Aljazeera.net English, our dream of bringing people and continents together is coming true. » (www.aljazeera.net)

 

– Página 28 –

 

« C’est la règle qui préside au traitement de toute information, à l’organisation de tous les débats et à l’agencement de tous les entretiens avec des invités extérieurs. » (Olfa Lamloum, p.32)

 

– Página 29 –

 

« […] Al-Jazira a brisé le tabou de la « vérité » unique, incontestable et incontestée, des régimes arabes. » (Olfa Lamloum, p.32)

 

– Página 31 –

 

« Dans Á contre-courant, pour la première fois, des dirigeants arabes étaient taxés au grand jour de laquais des Etats-Unis et leurs politiques stigmatisées pour leur servilité, leur hypocrisie et leur immoralité » (Hugh Miles, p.50).

 

« [Al-Qaradawi] dénonce la présence militaire étrangère en terre d’islam, mais fait l’éloge de l’ouverture politique au Qatar, approuve les attentas suicides en Israël, mais dénonce les attentats du 11 septembre […] » (Olfa Lamloum, p.64)

 

« Al Jezira s'est d'abord imposée par le professionnalisme ''technique'' de son traitement de l'information. Elle a rompu avec la télévision arabe ''de papa'', qui ignorait tout des rigueurs du montage, au bénéfice de plans interminables tout entiers consacrés à la gloire du détenteur du pouvoir. […] Sur le fond, le succès de la chaîne tient à deux recettes : sans pour autant tomber dans le manichéisme des chaînes étatiques, elle donne d'abord une représentation des tensions internationales plus proche de la sensibilité des téléspectateurs arabes. […] elle donne, de surcroît […], la parole à l'ensemble des forces politiques réelles. » (François Burgat)

 

 

– Página 34 –

« La faiblesse démographique structurelle de ces Etats les oblige à associer les citoyens des autres pays arabes au fonctionnement de leurs médias, ce qui les permet de les présenter comme étant des médias panarabes et de les utiliser comme moyen de légitimer leurs actions sur la scène arabe et internationale. » (Mohammed El Oifi p.93)

 

– Página 37 –

 

« A partir de 1969, l’islam politique s’impose progressivement dans l’espace urbain et les mouvements de contestation au sein du monde arabe, incarnant souvent une nouvelle version de l’anti-impérialisme. Soutenues par les élites occidentales, pour lesquelles l’islamisme incarne un nouveau « péril vert », les élites arabes au pouvoir opteront pour sa criminalisation et sa diabolisation systématique. » (Olfa Lamloum, p.68)

– Página 41 –

 

« En dépit de son hétérogénéité et de son échec face à la répression dans de nombreux pays, l’islam politique demeure sans conteste le courant d’opposition organisé le plus important dans l’espace arabe. La présence de figure islamiste sur Al-Jazira ne fait que refléter ce poids. D’autres courants de pensée moins organisés et plus marginaux sont aussi présents sur les ondes qataries. » (Olfa Lamloum, p.79)

 

 

– Página 43 –

« les Etats-Unis misent sur la ligne politique générale suivie par le ministre des affaires étrangères, Cheikh Hamad Bin Jassem Bin Jabr Al Thani : chef de file du rapprochement avec Tel-Aviv, ce dernier a transformé son pays en instrument irremplaçable d’une éventuelle normalisation israélienne avec les Etats arabes du Golfe. » (Françoise Sellier)

« Par sa hiérarchisation thématique, son choix des journalistes, des mots, des images et des acteurs politiques pour rendre compte du conflit, Al-Jazira a produit un sentiment de proximité et d’identification à la victime palestinienne, jamais atteint auparavant dans le monde arabe. » ((Olfa Lamloum, p.85)

– Página 44 –

 

« Reconnaissant à la fois Israël et la légitimité de la lutte armée à son encontre, défendant le leadership d’Arafat et contestant sa gestion corrompue et antidémocratique, nombreuses sont les contradictions au cœur du conflit d’Al-Jazira sur le conflit israélo-palestinien. Mais elles reflètent la complexité du réel et rencontrent le sentiment populaire. Ce qui explique l’importance de la chaîne dans les stratégies de communication d’Israël et de l’Autorité palestinienne, mais aussi les intimidations et les pressions dont elle est l’objet. »  (Olfa Lamloum, p.92)                                             

 

 

 

 

– Página 46 –

 

« L’information est toutefois différente d’un quelconque produit industriel, car elle est par essence un artefact culturel. Dans son travail d’élaboration, dans sa fabrication, elle cristallise une version du réel qui incorpore une perspective, des assomptions implicites, des valeurs, bref, une vision du monde. » (Semprini Andrea p. 18-19)

 

– Página 46 –

 

« […] Produire une information mondialisée, alors qu’elle s’attache en réalité à généraliser un point de vue particulier. La notion d’information mondialisée est théoriquement floue et empiriquement fragile. Elle présuppose une audience planétaire qui n’existe pas. Si en revanche nous adoptons un regard de type culturaliste sur l’information produite par CNN, nous pouvons constater qu’elle engendre un puissant dispositif symbolique, chargé de véhiculer un modèle social, un modèle culturel, un modèle économique, bref, un monde possible positif et attrayant. Il s’agit en d’autres termes, d’un véritable projet d’hégémonisme culturel. » (Semprini Andrea p. 20)

 

– Página 49 –

 

« In fact, alterity, as employed by Al Jazeera, resembles the marketing strategy for a corporate brand. Alterity is manufactured by the station to promote its image as an alternative news provider. » (Adel Iskander)

 

– Página 52 –

 

« Autre spécialiste de la propagande personnelle, Oussama ben Laden songea lui aussi très tôt à tirer parti d’Al-Jazira. » (Hugh Miles, p.61).

 

– Página 55 –

 

« Une illusion d'ouverture et de liberté de ton démentie par le parti pris, certes dissimulé, de présentateurs populistes et le choix des intervenants où l'on voit des poids lourds islamistes opposés à des poids plume progressistes ", commente un analyste égyptien de gauche, qui conclut avec amertume : " L'islamisme fait de l'Audimat, Al Jezira vend donc de l'islamisme! » (Alexandre Buccianti)

 

– Página 61 –

 

« Durant la guerre, des experts américains attentifs comprennent que la chaîne est non seulement le seul média crédible dans le monde arabe, mais aussi l'une des rares fenêtres de la démocratie dans cette partie du globe. » (Tewfik Hakem)

 

– Página 62 –

 

« Sa crédibilité remise en cause par une partie de la presse arabe, la chaîne qatarie perd également le monopole des vidéos envoyées par la cellule de propagande d'Al-Qaida, Essihab. » (Tewfik Hakem)

 

 

 

– Página 63 –

 

« Les Américains agissent sur le front médiatique comme sur le front militaire. Ils ont les moyens d'occuper le terrain, mais pas forcément de se faire entendre ou de se faire comprendre » (Tewfik Hakem)

 

« C'est la représentation américaine du monde qui a dominé pendant vingt ans, au Proche-Orient avec l'Iran, l'Irak, la Palestine, le Liban... créant une humiliation médiatique, largement sous-évaluée. Les médias américains, symbolisés par une CNN triomphante, ont couvert les événements du Proche-Orient pour leur opinion publique. Le drame est que ces images et ces informations étaient aussi reçues sur place et choquaient. La diversité des cultures et des idéologies existe. Surtout dans l'information et la communication. » (Dominique Wolton)

 

– Página 64 –

 

« L’importance de la maîtrise de l’information apparaît, à plus d’un titre, fondamentale de nos jours. Cela est notamment vrai dans la conduite des relations internationales, qu’il s’agisse de questions liées à la pais ou à la défense. » (Bakis Henry)

 

– Página 65–

 

« En Occident, l’idée que la libéralisation des médias arabes préfigure des changements politiques et sociaux d’envergure au Moyen-Orient a acquis la force d’un article de foi. Les plus optimistes pronostiquent que la télévision par satellite va balayer les obstacles traditionnels au progrès et résoudre tous les problèmes jusqu’alors insolubles, et qu’il en résultera une sorte de « glasnost islamique». » (Hugh Miles p. 341)

 

« Les analyses les plus sombres soutiennent même que la révolution de l’information pourrait en réalité raffermir l’emprise des régimes les plus oppressifs sur le peuple, les citoyens donnant libre cours à leur frustration dans le cadre des talk-shows d’Al-Jazira, tandis que le pouvoir demeure entre les mains de la même oligarchie. »

 

– Página 66 –

 

« In fact, Al Jazeera inherited not only most of the staff of the former BBC network but also its editorial spirit, freedom and style. » (El-Nawawy Mohammed, p.31)


Anexo II: Qatar en la península arábiga

                                                                                    

 

 

 

 


Anexo III: Cadenas nacionales públicas y privadas por satélite árabes

Países árabes (miembros del ASBU)

Cadenas nacionales árabes

Argelia

Canal Algérie, Algerian third Channel.

Arabia Saudí

Saudi Channel 1, Saudi Channel 2, Al Majd Channel, Al Ikhbariya, Sport Channel.

Bahrein

Bahreïn TV

Comores

 

Yibuti

RTD (Radio Télévision de Djibouti)

Egipto

ESC1, ESC2, Nile TV International, Nle Drama, bouquet Nilesat (chaînes thématiques), chaînes éducatives, Dream TV.

Emiratos árabes unidos

Abu Dhabi TV, Abu-Dhabi Business Channel, Sharjah Satellite Channel, Ajman Satellite TV, EDTV Doubaï, EDTV Drama, EDTV Sport, EDTV Business news.

Irak

Irak satellite Channel, Al-Shaqiya…

Jordania

Jordan Satellite Channel, Sport Channel 2, Movie Channel 3.

Koweït

Kuweit TV, Kuweiti Space network.

Líbano

Lebanese Broadcasting Corporation (LBC), LBC Amérique, LBC Australie, LBC Europe, Futur TV, Télé Liban, Al-Manar, NTV, NBN, Zen TV, NourSat.

Libia

Jamahiriyya Satellite Channel.

Marueccos

TVM, 2M.

Mauritania

Télévision de Mauritanie.

Oman

Oman TV.

Palestina

Palestinian Satellite Channel.

Qatar

Al-Jazeera Satellite TV, Qatar TV.

Somalia

 

Sudan

Sudan TV.

Siria

Syria Satellite Channel.

Túnez

TV7 Tunisie, Hannibal TV.

Yemen

Yemen TV.

 

Cuadro realizado a partir de los datos encontrados en Guaaybess Tourya, Télévisions arabes sur orbite. Un système médiatique en mutation (1960-2004), CNRS Editions, Paris, 2005, 264 p.

 

 

 

                                            Anexo IV: Código ético de Al-Yazira        

http://english.aljazeera.net

Aljazeera Code of Ethics

Being a globally oriented media service, Aljazeera shall determinedly adopt the following code of ethics in pursuance of the vision and mission it has set for itself:

 

1. Adhere to the journalistic values of honesty, courage, fairness, balance, independence, credibility and diversity, giving no priority to commercial or political considerations over professional ones.

 

2. Endeavour to get to the truth and declare it in our dispatches, programmes and news bulletins unequivocally in a manner which leaves no doubt about its validity and accuracy.

 

3. Treat our audiences with due respect and address every issue or story with due attention to present a clear, factual and accurate picture while giving full consideration to the feelings of victims of crime, war, persecution and disaster, their relatives and our viewers, and to individual privacy and public decorum.

 

4. Welcome fair and honest media competition without allowing it to affect adversely our standards of performance so that getting a "scoop" will not become an end in itself.

 

5. Present diverse points of view and opinions without bias or partiality.

 

6. Recognise diversity in human societies with all their races, cultures and beliefs and their values and intrinsic individualities in order to present unbiased and faithful reflection of them.

 

7. Acknowledge a mistake when it occurs, promptly correct it and ensure it does not recur.

 

8. Observe transparency in dealing with news and news sources while adhering to internationally established practices concerning the rights of these sources.

 

9. Distinguish between news material, opinion and analysis to avoid the pitfalls of speculation and propaganda.

 

10. Stand by colleagues in the profession and offer them support when required, particularly in light of the acts of aggression and harassment to which journalists are subjected at times. Cooperate with Arab and international journalistic unions and associations to defend freedom of the press.

 

 

 

 

 

Anexo V: Los programas de Al-Yazira

http://www.allied-media.com/aljazeera/JAZprograms.html

 

POPULAR NEWS PROGRAMS

 

v     Al Jazeera Investigative Programs 

An analytical, documentary-style program penetrates into the heart of matters usually shrouded in secrecy, exposing the real issues at hand. Relying on tangible evidence and expert analysis from observers and players in the field.

 

v     Al Jazeera This Morning

This news bulletin is Al Jazeera’s main morning show. It includes the latest news items & reports, in addition to sports, press review and feature stories.

 

v     Between the Lines     

The latest events, seen through the eyes of newspapers and magazines - showing their perspective on the world.   

 

v     Economic Bulletin

Today’s trends in world markets

 

v     News Bulletins

On-the hour News bulletins with detailed live, on-the-spot reporting by the Al Jazeera worldwide network of correspondents in all major Arab and international cities and capitals. Political, economic and other important developments are given accurate, unbiased coverage.

International news with emphasis on Arab world developments. Up to the minute coverage, using the world's top news agencies and our network of correspondents and journalists.

 

v     Today's Harvest 

An Extensive one-hour news bulletin program offering news coverage, compiling the headline news of the day in an extensive format, along with in-depth analysis and interviews. In addition to politics, the program also features highlights of economic and sports news.

 

v     Today's Interview        

Pre-recorded interviews with politicians, academics, and world leaders. Various Al Jazeera correspondents put themselves at the forefront of investigative journalism with their guests in the hot seat, grilling them with daring, comprehensive questions.   

 

v     Weekly File 

Unique in subject and presentation, this program analyzes the week's most important events in-depth, and discusses the causes and effects of the latest developments in a variety of fields.  Features interviews with experts and newsmakers.

 

 

 

POPULAR TALK PROGRAMS

 

v     Al Jazeera Platform 

An audience expresses opinions about issues concerning Arabs all over the world.

 

v     Century Witness

Every week, this program hosts a different personality who played a significant role in Arab politics during the past decades. They bear witness to the most important events during their time in leading positions, exposing facts that were shrouded in secrecy for years.

 

v     Cultural Forum

A panorama of variety from the Arab cultural scene hosting the leading innovators in intellectuals pursuit, art, theatre, cinema and music, trying to discover new generation of innovators in these fields. A program which will open the way for dialogue and debate of cultural issues objectively allowing for one & the other opinion.

 

v     For Women Only    

A first on Arab television, Al Jazeera has broken ground with the launching of this new discussion program presented by Montaha Al Ramahi and geared specifically towards women. Distinguished, educated women from all over the Arab world come to express their points of view regarding critical social, political, scientific and environmental issues. As with most Al Jazeera programs based on this format, audience input is vital to the show. 

 

v     More than One Opinion

A platform for a variety of opinions and views on political, economic, social, scientific and cultural issues. This weekly, live interactive program hosts varied personalities and experts on specific Arab and international issues.

 

v     No Frontiers

A discussion program that focuses on current affairs of interest to viewers from all sectors of society. Guests include politicians, party leaders, intellectuals, academics, experts and Islamic scholars who share their knowledge with the public and provide answers to audience queries.

 

v     Open Dialogue

Decision makers and intellectuals answer questions live from the audience on topics of general interest.

 

v     Opposite Direction

For the fifth year in a row, The Opposite Direction continues its tireless pursuit of daring controversial topics, and remains one of the most popular interactive programs amongst the Arabic-language Satellite Channels. Every Week, Dr. Faisal Al Qassem moderates a debate between two personalities with opposing views on a certain issue.

 

v     Religion & Life

Every week, Sheikh Yussef Al Qaradawi, a renowned Muslim scholar, tackles subjects of public concern in the Arab world, analyzing and filtering them through an Islamic point of view. The show relies on an open format, with audience participation. On certain occasions, the show also hosts other Muslim intellectuals, insuring a wide representation of differing Muslim ideologies.

 

 

v     Without Bounds

A political, academic or scientific personality agrees to answer questions "without bounds". There are no limits or taboos, and viewers can phone in their own questions.

 

OTHER POPULAR PROGRAMS

 

v     A Book Is the Best Companion

A program about western books in which dealing with Islamic issues are discussed.

 

v     Age of Speed

A series showcasing the technologies of car engines and designs. The series will compare recent industry developments with old styles, and includes motorcycles and speedboats.

 

v     Cinema In A Week

An enthralling entertainment program, offering viewers early sneak peaks of the latest Hollywood spectaculars, covering international events in the world of filmmaking.  The show features movie clips, interviews with stars, and a countdown of the 10 most popular movies.

 

v     Commanding the Heights of Economy  

The series chronicles the battle for economic power, the struggle between government and markets around the world. It confronts critical issues that have defined the wealth and fate of nations and will shape our lives in the 21st century.

 

v     Date In Exile 

 The program focuses on Arab personalities who emigrated to foreign countries early in their careers. They reveal their path to the top in their respective fields and how they managed to hold on to and celebrate their Arab Identity within the context of Western culture & civilization.

 

v     Friends Of The Arabs

Every edition of this weekly program chronicles the life of a Westerner who has chosen to live in an Arabic country.  The show sheds light on all aspects of living in an Arab society and how a Westerner adapts to life among Arabs. 

 

v     The History of Water

 Each episode presents the history of a body of water from the Himalayas to the deep heart of Africa, passing across great seas and oceans.

 

v     Horizons

 A program about travel and tourism in the world's most famous tourist sites and regions. It aims to explore the many facets of the industry which supports the economies of some of the hottest locations.

 

v     Pictures Talk

A program in which images speak for themselves. Some of the most striking video footage from around the world is televised unedited, with all original sound.  The viewer is invited to draw his own conclusions.

 

v     Sports Bulletin

Results and highlights from the world of sports.

 

v     World of Technology

A program that showcases all the latest technological advances.

 

v     Zena

An Award Winning Women's Program.  Zena takes its audience on a 30 minutes weekly tour of the world of fashion, covering wide-range of topics like Haute Couture, Make-up, Perfumes, and Jewelry. The program showcases the latest trends in fashion, as well as interviews with the most famous designers.


Bibliografía

 

§      Libros

- Barrat Jacques, « Diversité des pays musulmans, diversité des paysages médiatiques » in Géographie économique des médias. Diversité et Tiers-monde, Edition Litec, Paris, 1992, pp. 281-377

- Bakis Henry, Géopolitique de l’information, Que sais-je ?, Presse Universitaire de France, Paris, 1987, 127p.

- Charillon Frédéric, Leveau Rémy (dir.), Monarchies du Golfe. Les micro-Etats de la péninsule arabique, La Documentation française, Paris, 2005, 143p.

- El-Nawawy Mohammed, Iskandar Adel, Al-Jazeera. How the Free Arab Network Changed the World and Scooped the Middle East, Westview Press, USA, 2002, 228p.

- Guaaybess Tourya, Télévisions arabes sur orbite. Un système médiatique en mutation (1960-2004), CNRS Editions, Paris, 2005, 264 p.

- Joulié Jean-Louis, Le Qatar, Collection A Connaître, Edifra, Edition française pour le monde arabe, Beyrouth, 1994, 143p.

- Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, Editions La Découverte, Paris, 2004, 143p.

- Lamloum Olfa (dir.), Irak, les médias en guerre, Actes Sud / Institut Panos Paris, France, 2003, 236p.

- Miles Hugh, Al-Jazira. La chaîne qui défie l’Occident, Editions Buchet/Chastel, 2006, 457p.

- Tudesq André-Jean (dir.), Les médias acteurs de la vie internationale, Editions Apogée, France, 1997, 181p.

- Semprini Andrea, L’information en continu. France Info et CNN, INA, Edition Nathan, Paris, 1997, 221p.

- Semprini Andrea, CNN et la mondialisation de l’imaginaire, CNRS Editions, Paris, 2000, 187p.

§      Prensa

Le Monde

- « Al Jezira, la télé qui réveille le monde arabe », Gilles Paris, 07 de marzo de 2000

- « Al Jezira, CNN du monde arabe », Alain Constant, 08 de octubre de 2001

- « L'islamisme fait de l'Audimat », Alexandre Buccianti , 7 de octubre de 2001

- « Une chaîne érigée au rang de symbole », entrevista de François Burgat realizada por Francis Cornu, 7 de octubre de 2001

- « La télévision arabe Al-Jazira est censurée aux Etats-unis », Florence Amalou et Eric Leser, 13 de octubre de 2001

- « CNN perd son monopole de l’information mondiale », Nicole Vulser, 16 de octubre de 2001

- « Terrorisme et communication politique », Dominique Wolton, 25 de octubre de 2001

- « Al-Jazira sous le feu de la critique internationale », Florence Amalou, 6 de noviembre de 2001

- « Une télévision qui se veut moderne, laïque et panarabe », Tewfik Hakem, 6 de noviembre de 2001

- « Un élément de la stratégie politique originale de l’émir du Qatar », Sophie Shihab, 6 de noviembre de 2001

- « Les médias américains dans la guerre », Thomas Sancton, 30 de noviembre de 2001

- « Al-Jazira et Washington se sont livré un an de guerre en sourdine », Tewik Hakem, 11 de septiembre de 2002

- « Al-Jazira courtisée par les médias occidentaux », Guillaume Fraissard, 22 de febrero de 2003

- « La nouvelle télévision arabe Al-Arabiya part à l'assaut d'Al-Jazira », Tewfik Hakem, 15 de marzo  de 2003

- « Washington lance une chaîne de télévision pour séduire le monde arabe », Tewfik Hakem, 1 de noviembre de 2003

- « La chaîne Al-Jazira part à la conquête des enfants du monde arabe », Daniel Psenny, 15 de septiembre de 2005

- « Un groupe qui ne se contente plus de l’information », Daniel Psenny, 15 de septiembre de 2005

- « La "CNN arabe " dérange toujours », Francis Cornu, 10 de febrero de 2006

- « CNN International a un public et des priorités éditoriales différents du CNN américain », entrevista de Nick Wrenn realizada por Jean-Pierre Langellier, 22 de marzo de 2006

- « Al-Jazira va lancer une chaîne en anglais ambitieuse... et ambiguë », Jean-Pierre Langellier, 22 de febrero de 2006

 

Le Monde Diplomatique

- « Le Qatar dans la cour des grands », Françoise Sellier, Noviembre de 1997

- « La télévision arabe qui dérange », David Hirst, Agosto de 2000

- « Contestation de l’ordre médiatique américain », Eric Klinenberg, Abril de  2004

-« Le Qatar se veut un modèle pour le Golfe », Pascal Boniface, Junio de 2004     

- « Le feuilleton qui bouscule la société saoudienne », Pascal Ménoret, Septiembre de 2004

 - « Désinformation à l’israélienne », Mohammed El Oifi, Septiembre de 2005

§      Documentales audiovisuales

- « Al-jazira: la nouvelle voix des arabes », Tewfik Hakem, Arte, 2002

- « Du côté des chaînes arabes », Arrêt sur images (magazine semanal), France 5, 13 de abril de 2003

- « Les coulisses d’Al-JAzeera », Merci pour l’info (magazine), Canal+, 16 de septiembre de 2003

- « Al Jazira, des voix arabes », Ali Essafi, France 5, 16 de marzo de 2004

 

§      Internet

Al-Jazeera http://english.aljazeera.net/HomePage        

Wikipedia www.wikipedia.org

Transnational Broadcasting Studies www.tbsjournal.com

- « Is Al Jazeera Alternative? Mainstreaming Alterity and Assimilating Discourses of Dissent», Adel Iskandar www.tbsjournal.com/Iskandar.html

- Interview with Ahmed Sheikh, Chief Editor of Al-Jazeera www.tbsjournal.com/sheikh.htm           

- « Stock Market Reporting On-air  Now: Business TV Comes of Age in the Middle East», Tara Joseph www.tbsjournal.com/joseph.htm

- « The Future of Al-Jazeera», Wadah Khanfar www.tbsjournal.com/khanfar.htm

 

- « The Gulf Media Mood: As Good as Ever», S. Abdallah Schleifer, www.tbsjournal.com/omnibus.htm

 

- «Troyan Horse? On the Arab Media as a Portal for Western Goods and Values», Jihad Fakhreddine www.tbsjournal.com/fakhreddine.htm

 

- «Who Is Al Jazeera’s Audience? Deconstructing the Demographics and Psychographics of an Arab Satellite News Network», Philip Auter, Mohamed M. Arafa, y Khaled Al-Jaber www.tbsjournal.com/auter.htm

 

http://arabworld.nitle.org/texts.php?module_id=13&reading_id=1029&sequence=5

«Whys and Wherefores of Satellite Channel Ownership», Naomi Sakr

§      Centros de documentación consultados:

Biblioteca Nacional de Francia (BNF), Instituto Nacional Audiovisual (INA).

                                                                                            

 

 

 

 

 

 

 



[1] Cf. anexo II

[2] « Le Qatar dans la cour des grands », Françoise Sellier, in Le Monde Diplomatique de Noviembre de 1997

[3] Para esta parte, nos apoyaremos principalmente en la obra de Frédéric Charillon y Rémy Leveau (dir.), Monarchies du Golfe. Les micro-Etats de la péninsule arabique, La Documentation française, Paris, 2005, 143p.

[4] Cifras del Ministerio de Asuntos Exteriores de Qatar, para el año 2004.

[5] « La télévision arabe qui dérange », David Hirst, in Le Monde Diplomatique de Agosto de 2000

[6] Miles Hugh, Al-Jazira. La chaîne qui défie l’Occident, Editions Buchet/Chastel, 2006, p.16

[7] Frédéric Charillon y Rémy Leveau (dir.), Monarchies du Golfe. Les micro-Etats de la péninsule arabique, op.cit. p. 139

[8] « Le Qatar se veut un modèle pour le Golfe », Pascal Boniface, in Le Monde Diplomatique de Junio de 2004

[9] « Le Qatar se veut un modèle pour le Golfe », ibid

[10] « Le Qatar se veut un modèle pour le Golfe », ibid.                

[11] « Le Qatar dans la cour des grands », Françoise Sellier, in Le Monde Diplomatique de Noviembre de 1997

[12] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, Editions La Découverte, Paris, 2004, p           

[13] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p.64

[14] Lamloum Olfa, ibid. p.64             

[15] J.-P. Basquiat y R. Ganne citados por Bakis Henry in Géopolitique de l’information, Que sais-je ?, Presse Universitaire de France, Paris, 1987, p.38

[16] Barrat Jacques, « Diversité des pays musulmans, diversité des paysages médiatiques » in Géographie économique des médias. Diversité et Tiers-monde, Edition Litec, Paris, 1992, pp. 281-377

[17] Barrat Jacques, « Diversité des pays musulmans, diversité des paysages médiatiques » in Géographie économique des médias. Diversité et Tiers-monde, op.cit., p. 289

[18] Guaaybess Tourya, Télévisions arabes sur orbite. Un système médiatique en mutation (1960-2004), CNRS Editions, Paris, 2005, pp.17-18

[19] Cf. anexo III

[20] «Whys and Wherefores of Satellite Channel Ownership», Naomi Sakr http://arabworld.nitle.org/texts.php?module_id=13&reading_id=1029&sequence=5   

[21] Guaaybess Tourya, Télévisions arabes sur orbite. Un système médiatique en mutation (1960-2004), op.cit. p. 78

[22] « Al-jazira: la nouvelle voix des arabes » de Tewfik Hakem o « Al Jazira, des voix arabes » de Ali Essafi por ejemplo.

[23] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p.11

[25] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p.10

 

[29] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p.32

[30] Lamloum Olfa, ibid. p. 32

[31] Cf. anexo V

[32] Miles Hugh,  Al-Jazira. La chaîne qui défie l’Occident, op.cit.p.50

[33] Miles Hugh, ibid. p. 49

[34] Miles Hugh,  ibid. p. 50

[35] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p. 64

[36] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p. 64

[37] « Une chaîne érigée au rang de symbole », entrevista de François Burgat realizada por Francis Cornu, 7 de octubre de 2001

 

[38] El-Nawawy Mohammed, Iskandar Adel, Al-Jazeera. How the Free Arab Network Changad the World and Scooped the Middle East, Westview Press, USA, 2002, p.49

[39] « L’opinion publique arabe » dans la stratégie américaine : une variable insaisissable, Mohammed El Oifi in Charillon Frédéric, Leveau Rémy (dir.), Monarchies du Golfe. Les micro-Etats de la péninsule arabique, op.cit. p.93

[40] Mohammed El Oifi, ibid.. p. 93

 

[42] La sharia es el conjunto de las leyes de la religión musulmana dictadas por Allah en el Corán o en los hadithes y que conciernen todas las actividades humanas.

[44] El verde es el color del Islam.

[45] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p.68

[46] Lamloum Olfa, ibid. p.35

                   

[47] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p.71           

[48] Lamloum Olfa, ibid. p.71

[49] Lamloum Olfa, ibid. p.72               

[50] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p.79           

[52] « Le Qatar dans la cour des grands », Françoise Sellier, in Le Monde Diplomatique de Noviembre de 1997

[53] « Le Qatar dans la cour des grands », Françoise Sellier, in Le Monde Diplomatique de Noviembre de 1997

[54] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p.82

[55] Lamloum Olfa, ibid., p. 85             

[56] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p.92

[57] « Al Jezira, la télé qui réveille le monde arabe », Gilles Paris, Le Monde del  07 de marzo de 2000

 

[58]  Semprini Andrea, CNN et la mondialisation de l’imaginaire, CNRS Editions, Paris, 2000, p. 29

[59] Semprini Andrea, CNN et la mondialisation de l’imaginaire, op.cit. p. 18-19

[60] Semprini Andrea, CNN et la mondialisation de l’imaginaire, op.cit., p. 20                     

[61] « Is Al Jazeera Alternative? Mainstreaming Alterity and Assimilating Discourses of Dissent», Adel Iskandar www.tbsjournal.com/Iskandar.html

[62] « Is Al Jazeera Alternative? Mainstreaming Alterity and Assimilating Discourses of Dissent», Adel Iskandar www.tbsjournal.com/Iskandar.html

[63] « Is Al Jazeera Alternative? Mainstreaming Alterity and Assimilating Discourses of Dissent», Adel Iskandar www.tbsjournal.com/Iskandar.html.

[64] Miles Hugh, Al-Jazira. La chaîne qui défie l’Occident, op.cit. p.61

[65] Lamloum Olfa, Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p. 46

[66] Citada por Olfa Lamloum in Al-Jazira, miroir rebelle et ambigu du monde arabe, op.cit. p. 46

[67] Cf. p.13

[68] « L'islamisme fait de l'Audimat », Alexandre Buccianti , 7 de octubre de 2001

[69] Ibid.

[70] « CNN perd son monopole de l’information mondiale », Nicole Vulser, in Le Monde del 16 de octubre de 2001

[71] « La télévision arabe qui dérange », David Hirst, in Le Monde Diplomatique de Agosto de 2000

[72] Ibid.

[73] « La télévision arabe Al-Jazira est censurée aux Etats-unis », Florence Amalou et Eric Leser, in Le Monde del 13 de octubre de 2001

 

[74] « La télévision arabe Al-Jazira est censurée aux Etats-unis », Florence Amalou et Eric Leser, in Le Monde del 13 de octubre de 2001

[75] « Les médias américains dans la guerre », Thomas Sancton, in Le Monde del 30 de noviembre de 2001

[76] « Contestation de l’ordre médiatique américain », Eric Klinenberg, in Le Monde Diplomatique de Abril de  2004

[77] « Contestation de l’ordre médiatique américain », Eric Klinenberg, in Le Monde Diplomatique de Abril de  2004.

[78] « La télévision arabe Al-Jazira est censurée aux Etats-unis », Florence Amalou et Eric Leser, in Le Monde del 13 de octubre de 2001

[79] Ibid.

[80] « Al-Jazira et Washington se sont livré un an de guerre en sourdine », Tewik Hakem, in Le Monde del 11 de septiembre de 2002

[81] « Al-Jazira et Washington se sont livré un an de guerre en sourdine », Tewik Hakem, in Le Monde del 11 de septiembre de 2002

[82] « Washington lance une chaîne de télévision pour séduire le monde arabe », Tewfik Hakem, in Le Monde del 1 de noviembre de 2003

[83] « Terrorisme et communication politique », Dominique Wolton, in Le Monde del 25 de octubre de 2001

[84] Charillon Frédéric, Leveau Rémy (dir.), Monarchies du Golfe. Les micro-Etats de la péninsule arabique, op.cit. p. 89

[85] Bakis Henry, Géopolitique de l’information, op.cit. p.3

[86] Miles Hugh, Al-Jazira. La chaîne qui défie l’Occident, op.cit. p. 341

[87] Miles Hugh, Al-Jazira. La chaîne qui défie l’Occident, op.cit. p. 342

[88] « Al-jazira: la nouvelle voix des arabes », Tewfik Hakem, Arte, 2002

[89] El-Nawawy Mohammed, Iskandar Adel, Al-Jazeera. How the Free Arab Network Changad the World and Scooped the Middle East, op.cit., p. 31

                                                                      

[90] « Al-Jazira va lancer une chaîne en anglais ambitieuse... et ambiguë », Jean-Pierre Langellier, 22 de febrero de 2006

 

[91] « Al-Jazira va lancer une chaîne en anglais ambitieuse... et ambiguë », Jean-Pierre Langellier, 22 de febrero de 2006